Lastra, la Ășltima gran ‘sanchista’ que abandona el presidente

La hasta ahora vicesecretaria general del PSOE se une a una larga lista de colaboradores muy cercanos a SĂĄnchez que acaban cayendo, de Carmen Calvo a Paco Salazar

Pedro SĂĄnchez ayuda a Adriana Lastra en una imagen de archivo. EFE

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El Manual de resistencia del presidente del Gobierno, Pedro SĂĄnchez, defiende una tesis clara y que se ha vuelto a ejecutar en las Ășltimas horas: ser parte del nĂșcleo duro, del cĂ­rculo mĂĄs cercano, no te exime de poder convertirte en un lastre y que prescindan de ti. Por eso, la dimisiĂłn de la hasta ahora vicesecretaria general del PSOE, Adriana Lastra, que alega motivos personales y de salud para dar este paso al lado, aunque chocante, no supone un antes y un despuĂ©s.

Lastra se suma a la lista de miembros de la guardia pretoriana del lĂ­der socialista que una vez lo fueron todo para Ă©l y se erigieron como parte imprescindible de sus engranajes, ademĂĄs de pelear con fiereza y contra capa y espada por su causa, pero que, de la noche a la mañana, dejaron de aportar y fueron apartados. Hace ademĂĄs un año de los Ășltimos cambios, sonados, por inesperados y por que, vistos con el tiempo, no surtieron el efecto con el que se idearon.

Fue, claro, la salida de Moncloa de la vicepresidenta Carmen Calvo: del ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, y del, en ese momento, jefe de gabinete de Sånchez, Ivån Redondo. Los tres, en mayor o menor medida con el paso del tiempo -porque las relaciones políticas, como la vida, nunca son lineales-, siempre estuvieron desde el inicio de la remontada de Pedro Sånchez. Como la propia Lastra, que desde que el socialista accedió a la secretaría general del partido en 2014, siempre estuvo ahí.

Lozano, Salazar, Castellanos y Serrano

Aunque sean los nombres mĂĄs conocidos, no son los Ășnicos. Los trabajadores de Moncloa, los segundas espadas, los que nunca llevan foco pero cuyo trabajo es, a veces, el mĂĄs imprescindibles, tambiĂ©n caĂ­an como moscas en cuanto dejaron de ser Ăștiles. QuizĂĄ el caso mĂĄs sonado sea el de Irene Lozano, tan cercana a SĂĄnchez que le dio «forma literaria» al libro del socialista, el citado Manual de resistencia. Una colaboradora de referencia… hasta que el viento soplĂł -polĂ­ticamente hablando- en otra direcciĂłn y SĂĄnchez optĂł por prescindir de sus servicios. Ahora es la directora general de Casa Árabe, una instituciĂłn pĂșblica menor.

Pero quizås sean mås paradigmåticos los casos de Juanma Serrano, Paco Salazar o Llanos Castellanos, tres figuras muy cercanas al presidente que, de un momento a otro, desaparecieron. Serrano fue el primero en caer: era jefe de gabinete, pero no sobrevivió la prueba de la moción de censura. Por su parte, Castellanos sucedió en el cargo a Salazar. Ambos fueron directores adjuntos de gabinete y estuvieron muy cerca de la causa del líder socialista. Salazar fue uno del conciliåbulo inicial que hizo que Sånchez llegara a la gloria socialista, junto con Calvo, Ábalos, Lastra y Serrano. Sólo sobrevive un hombre de aquellos: Santos Cerdån, actual secretario de Organización del PSOE.

Incluso le pasĂł a CĂ©sar Luena, que fue nĂșmero dos del partido y cayĂł en desgracia. No sobreviviĂł al proceso de dimisiĂłn de SĂĄnchez y posterior vuelta al poder. TambiĂ©n cayĂł en desgracia el periodista Miguel Ángel Oliver, que colgĂł los hĂĄbitos de la televisiĂłn para acceder a la SecretarĂ­a de Estado de ComunicaciĂłn, donde se enfrentĂł a la crisis del covid-19. En cuanto se dio, mediĂĄticamente hablando, por terminado el asunto, Oliver fue sustituido.

Hernando y LĂłpez resucitaron

Sin embargo, para cuando Adriana Lastra decida reincorporarse a la vida profesional tras este parĂłn obligado por su embarazo de riesgo y futura maternidad, hay lugar para la esperanza. Porque hay precedentes de grandes colaboradores a los que SĂĄnchez les cortĂł la cabeza sin mayor miramiento y con el tiempo han vuelto a la primerĂ­sima lĂ­nea de fuego.

Ya le pasó a Antonio Hernando y a Óscar López, dos colegas apartados que hoy gozan de tan amplias responsabilidades que sus nombres protagonizan la rumorología sobre los siguientes cambios que Sánchez va a acometer en el Gobierno y en el partido.

Hernando es, en la actualidad, director adjunto del gabinete del presidente. LĂłpez, jefe de gabinete.

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