Las autonomías tratan de salvar el turismo tras el fracaso de Sánchez
Las comunidades buscan solas cómo retener turistas, cuando acaba el plazo que se dio el Gobierno para lograr que Reino Unido suavizara sus restricciones
Hace una semana, el Gobierno de Pedro Sánchez afirmó que esperaba que en cuestión de siete días estuvieran zanjadas las negociaciones con Reino Unido y se anunciase una cuarentena más suave para los viajeros procedentes de España. El plazo ha acabado, y en cambio ha seguido inflándose la lista de países que vetan el ingreso desde aeropuertos españoles o que imponen aislamientos a quienes lleguen desde el país.
Mientras el presidente del Gobierno ha iniciado ya sus vacaciones, con unos primeros días de descanso en Lanzarote, algunos ministros han puesto en marcha su particular campaña de autopromoción también con viajes a destinos turísticos españoles y promesas de hacer hasta lo imposible para salvar el turismo. Pero el fracaso del Ejecutivo en este cometido y su general inacción han obligado a las comunidades autónomas a asumir solas el peso de la caída de este sector, a última hora y en soledad.
Valencia, una de las autonomías que mejor está navegando la temporada de rebrotes, ha informado este jueves de que dará cobertura gratuita a todos los turistas que, ante sospechas o confirmaciones de Covid-19, deban alargar su estancia y permanecer en la Comunitat en aislamiento domiciliario. La Generalitat asumirá una inversión de 280.000 euros en la contratación de servicios de alojamiento en dos hoteles refugio en Benidorm y la ciudad de Valencia.
La cuarentena impuesta por Reino Unido a viajeros procedentes de España ha golpeado duramente a la Comunitat Valenciana, siendo Benidorm uno de los mayores imanes de turistas británicos de España. Con esta iniciativa, se pretende «transmitir confianza y seguridad a los mercados nacionales e internacionales», y «supone incorporar una nueva propuesta de valor ligada a la seguridad del turista que ofrece un hospedaje con todas las garantías y sin coste alguno».
Una iniciativa semejante ha cobrado fuerza en Canarias. El gobierno de las islas ha suscrito un seguro que cubrirá la asistencia médica, estancia en caso de cuarentena y gastos de repatriación de turistas afectados por el coronavirus durante su permanencia en la comunidad. La póliza cubre tanto a turistas españoles, incluidos los insulares, como extranjeros, con la condición de que no supieran antes de desplazarse a las islas que habían contraído la enfermedad.
Aplaudida por los hosteleros de Canarias, la iniciativa de la Consejería de Turismo es otra que se ha tomado ante la inacción del Gobierno y su imposibilidad de brindar seguridad a los turistas y, en general, a los gobiernos europeos, que en plena temporada de verano cuando menos aconsejan no viajar a España. Por ello, Turismo de Gran Canaria ha iniciado una ronda de contactos con los cónsules en aras de coger el toro por los cuernos.
Por su parte, Galicia puso en marcha la semana pasada un registro de viajeros que se actualiza para incluir aquellos lugares de origen con una alta incidencia del virus en las dos semanas anteriores. Se han anotado ya más de 107.000 personas. Esta semana se ha añadido Madrid al listado y han salido La Rioja y Portugal. Cataluña, Aragón, Navarra y País Vasco, además de 130 países y territorios internacionales, se mantienen.
Medidas del Gobierno
En una visita este jueves a Palma de Mallorca, José Luis Escrivá ha asegurado que contempla prorrogar más allá del 30 de septiembre los ERTE ante el impacto del coronavirus en el turismo. El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se ha comprometido también a intentar mantener prestaciones y bonificaciones específicas para los fijos discontinuos del sector.
Lo mismo ha señalado este pasado miércoles Yolanda Díaz. La ministra de Trabajo ha reconocido que los datos sobre la evolución del empleo en Canarias muestran que las islas «van a seguir necesitando la protección de los ERTE» más allá del plazo general establecido, pero no se ha comprometido con plazos. En una visita a Las Palmas, Díaz ha reconocido que la dependencia del turismo de las islas han afectado su economía.