La suma de PP y Vox arrebataría al PSOE de Page el gobierno en Castilla-La Mancha
Emiliano García-Page, muy crítico con Sánchez por los indultos, ve amenazada su continuidad en la presidencia autonómica. Una encuesta de NC Report otorga la mayoría absoluta a PP y Vox
A Emiliano García-Page le preocupa que las decisiones de Sánchez al frente del Gobierno le pasen factura a él en Castilla-La Mancha. Y tiene motivos para ello. Según la última encuesta de NC Report para La Razón, la suma de PP y Vox desbancaría al PSOE del ejecutivo autonómico de celebrarse hoy elecciones.
Este estudio demoscópico, el primero que se realiza tras la decisión de Sánchez de poner en marcha los indultos a los presos del ‘procés’, refleja a las claras un retroceso del PSOE, que vería amenazado su gobierno en uno de los feudos históricos del partido: solo María Dolores de Cospedal, en 2011, fue capaz de llevar al PP al ejecutivo regional.
Según la encuesta de NC Report, el PSOE pasaría de 19 a 15 escaños, a dos de los 17 que marca la mayoría absoluta. El PP, por su parte, pasaría de 10 a 15, empatando con los socialistas en representación parlamentaria.
La desaparición de Ciudadanos en el Parlamento autonómico, que pasaría de 4 a 0 escaños, provocaría la irrupción de Vox con tres diputados. Los votos de los de Abascal en la investidura garantizarían el gobierno del PP en la región y la salida de Emiliano García-Page. Podemos, por su parte, no recuperaría la representación en la Cámara autonómica que ya perdió en 2019.
Los datos de NC Report revelan que un 13,8% de los electores socialistas no acudirían a votar de celebrarse hoy elecciones en Castilla-La Mancha. El PSOE, además, perdería 53.000 votantes, que apostarían en esta ocasión por los partidos del bloque de la derecha (PP, Vox y Ciudadanos). El trasvase a Podemos, sin embargo, sería mínimo: 2.000 electores.
El PP, en cambio, lograría retener al 87% de su electorado y, además, recogería la mayoría de votos procedentes de Ciudadanos y 34.000 papeletas de antiguos votantes socialistas. De esta forma, los populares protagonizan un importante crecimiento electoral en la región, a pesar de que 9.000 de sus antiguos votantes respaldaran ahora Vox.
Los indultos y el 4-M, claves
La encuesta de NC Report deja a las claras el retroceso del PSOE tras la debacle socialista en las elecciones del 4 de mayo en Madrid y la decisión, por parte de Pedro Sánchez, de poner en marcha los indultos a los políticos catalanes condenados por el procés.
Tras la fallida moción de censura en Murcia, el presidente del Gobierno encadena ya varias semanas de malas noticias que están empezando a pasar factura en los territorios del PSOE. Por ese motivo, varios barones socialistas, con Emiliano García-Page a la cabeza, han optado por marcar distancias con Sánchez.
La semana pasada, y después de las palabras de Sánchez a favor de los indultos, Page y Vara hicieron pública su oposición a la medida de gracia, mientras que Ximo Puig apoyó esa iniciativa. El PSOE, que afrontaba el Congreso Federal de octubre dando una imagen exterior de unidad, empieza a partirse por el plan de Moncloa para blindar la alianza con ERC lo que queda de legislatura.
Las voces contrarias a la decisión de Sánchez no dejan de multiplicarse dentro del partido, poniendo en cuestión el objetivo de Sánchez de situar a afines en las ejecutivas regionales de todas las federaciones el próximo otoño.
La primera prueba de fuego será en el PSOE de Andalucía, donde una victoria de Susana Díaz frente al sanchista Juan Espadas puede poner patas arriba al Partido Socialista.