La sexta ola se estabiliza en Cataluña, Madrid, Valencia y Andalucía

Aunque los datos de casos positivos por coronavirus en España son aún altísimos, los indicadores de la comunidades autónomas de Cataluña, Madrid, Valencia y Andalucía han apuntado este martes que la curva de la sexta ola tiende a estabilizarse, por lo que prevén llegar al pico de contagios próximamente. 

Los representantes autonómicos atribuyen estos indicios de mejora de la evolución de la pandemia, en buena parte, a la vacunación masiva. De hecho, cabe señalar que este mismo martes, la Comunidad de Madrid ha abierto la autocita de vacunación contra la Covid-19 tanto para los mayores de 45 años que requieran la tercera dosis como para la primera dosis de los niños mayores de 5 años.

Asimismo, el consejero de Sanidad de la Comunidad, Enrique Ruiz Escudero, ha afirmado que «estamos en una fase de meseta que esperamos sea el preludio del descenso. La incidencia acumulada a siete días también indica que podemos estar cerca de alcanzar el pico de esta sexta ola».

En la región se han notificado este martes 20.195 nuevos casos, de los cuales 15.693 en las últimas 24 horas, y han sumado 31 fallecidos, aunque desciende la ocupación hospitalaria levemente.

Por su parte, en Cataluña, Patricia Plaja, portavoz del Govern, ha asegurado que «con prudencia que hay indicios de mejora», y ha avanzado que el Ejecutivo catalán no contempla prorrogar el toque de queda más allá del 21 de enero, pese a que en Cataluña se han registrado en las últimas 24 horas 43.512 casos positivos de coronavirus y 89 muertes.

Sin embargo, Cataluña está a punto de superar el pico de la sexta ola. El Departamento de Salud de la Generalitat notificó este lunes 138.000 positivos en la última semana con datos consolidados, entre el 31 de diciembre y el 6 de enero, una cifra que disminuye por primera vez en el último mes. El acumulado semanal entre el 30 de diciembre y el 5 de enero era de 148.000 positivos.

En el caso de Andalucía, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha apuntado también que España podría estar «al comienzo del principio del final de la sexta ola» ya que la capacidad infecciosa «no tiene correspondencia en la gravedad en el ámbito clínico», de manera que en la incidencia acumulada empieza a notarse «cierta relajación, a desacelerarse».

A pesar de que la comunidad ha sumado este martes 28 muertos por coronavirus, el dato más alto en cuatro meses, y 8.510 casos, la tasa de incidencia ha bajado a 1.610 puntos, lo que supone 37,3 puntos menos que el lunes.

El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, se ha mostrado confiado en que «entre esta semana y principios de la próxima pueda empezar ya el cambio en la evolución de la pandemia » y se registre una disminución «bastante importante y rápida» de casos positivos.

Sin embargo, la tendencia en la comunidad es aún alta y según datos facilitados por el Ministerio de Salud el lunes, la incidencia alcanzó los 2.454,26 casos por cada 100.000 habitantes. Además, durante el fin de semana fallecieron 22 personas y dejó un nuevo récord de 29.347 contagios.

Los efectos de esta ola van para largo

Sin embargo, a pesar de que pueda vislumbrarse esa luz al final del túnel, los efectos de esta ola van para largo. De hecho, Cataluña alcanzó ayer nuevo máximo con casi cien mil visitas a sus ambulatorios y en Andalucía se ha batido el récord de espera.

Por su parte, África González, inmunóloga de Cinbio, asegura que al haber tanta gente inmunizada por el contagio o por las vacunas, la inmunidad comunitaria se ha ido obteniendo. Pero la atención primaria tardará en recuperarse. A pesar de los indicios de mejora, la variante Ómicron continúa expandiéndose, y en España se están notificando más de 100.000 nuevos casos cada día.