La Policía identifica al autor de la carta con navaja y amenazas contra Reyes Maroto
Se trata de un vecino de El Escorial, diagnosticado con una enfermedad mental , obsesionado con la ministra y que puso en el remitente de la carta su nombre y dirección reales
La Policía Nacional ha identificado este lunes al autor de la carta amenazante contra la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, que recibió la misiva junto a una navaja con unas manchas aparentaban ser de sangre.
Se trata de un hombre residente de la localidad madrileña de El Escorial, que entregó la carta el pasado miércoles en la única oficina de Correos de la localidad, con la navaja camuflada entre dos CD con el objetivo de dificultar la detección del arma mediante rayos X.
Dicha misiva llegaría al ministerio de Industria el pasado viernes 23 de abril, donde finalmente se detectaría el arma camuflada dentro de la carta durante los controles de seguridad.
Según ha explicado la Policía Nacional, se trata de un vecino de la localidad que estaría obsesionado con la ministra desde hace tiempo, con una enfermedad mental diagnosticada y que ha puesto las cosas muy sencillas a las FCSE para que se le detecte, ya que puso su verdadero nombre y dirección en el remitente de la carta.
No obstante, según los primeros indicios de la Policía, no parece que exista relación entre el autor de esta carta y el presunto autor cuya identidad aún se desconoce, de las tres misivas amenazantes con balas de fusil de asalto que llegaron al Ministerio de Interior la semana pasada, entonces dirigidas al ministro de dicha cartera, Fernando Grande-Marlaska, a la directora general de la Guardia Civil, María Gámez, y al exvicepresidente y candidato por Unidas Podemos a las elecciones de la Comunidad de Madrid, Pablo Iglesias.
El modus operandi tampoco coincide, en primer lugar, por las fechas, porque las primeras cartas se depositaron en un buzón de correos el día 19 de abril, mientras que la misiva dirigida a Maroto se envió desde un paquete acolchado desde una oficina de correos el día 21, momento en el que no había trascendido a los medios la información sobre las primeras amenazas.
El autor de la misiva a la ministra, por otro lado, escribió su nombre en el sobre a mano, mientras que el autor de las otras tres misivas escribió todos los datos con una regla de letras, de forma que se dificultara su identificación.