La operación Gabilondo se hunde: no atrae a los votantes de Cs
La 'factoría Moncloa' cambia de estrategia en la campaña de Gabilondo. El CIS corrobora que la bolsa de votantes de Cs indecisos se va para Isabel Díaz Ayuso.
El equipo de campaña del candidato socialista Ángel Gabilondo lleva días lanzando mensajes de S.O.S. El ahora conocido como ‘soso, serio y formal’ no remonta en las encuestas, la izquierda sigue desmovilizada y para colmo la estrategia de Moncloa (a por el voto de Ciudadanos) no surte efecto.
Los artífices de la campaña socialista desandan estos días los pasos dados y reorientan su estrategia. Se han dado cuenta de que Gabilondo no atrae a los votantes de Cs y, según el último CIS, se los estaría llevando Isabel Díaz Ayuso. El PP se lleva casi el 50% del voto.
«El desempate está en los votantes de Cs», dijo Gabilondo en uno de sus encuentros de precampaña. La campaña socialista fabricada desde Moncloa ponía énfasis en atraer a ese votante de centro que tras el ‘hundimiento’ de Cs a raíz de las mociones de censura cambiaría su voto por un partido progresista.
El penúltimo sondeo del CIS, en el que algunos en Moncloa se escudaron, cifraba esta bolsa de indecisos en torno a un 30%. Sin embargo y tal y como publicó Economía Digital, las criticas se sucedían en el PSOE madrileño porque «son muy pocos», argumentaron.
Los recelos crecían entre la federación y Ferraz «porque nunca antes se había visto tanta injerencia» por parte del órgano nacional y del Gobierno en una campaña, sentencian. Ahora el enfado es el doble porque hay que reorientar la estrategia puesta en marcha para movilizar el voto progresista.
«Votar, votar y votar»
El presidente del Gobierno inmerso como primera espada socialista en la campaña contra la candidata más fuerte, Isabel Díaz Ayuso, ya está aplicando en los mítines eso del «votar, votar y votar».
Al puro estilo «vacunar, vacunar y vacunar» que siempre recuerda cuando le preguntan sobre la estrategia para derrotar a la pandemia, Pedro Sánchez enmienda el planteamiento centrista para buscar votos y se mete de lleno en movilizar a los suyos.
Este giro también podría implicar que el candidato socialista ya no diga tan alto el ‘con Iglesias no’, sino el ‘bueno, ya veremos’. En el partido todavía no han abordado las alianzas postelectorales y el vuelco o no que supondrían en Moncloa.
Este nuevo cambio se ha podido esta semana en un desayuno informativo organizado por Europa Press, donde para Gabilondo su mínimo problema, aseguró, sería ponerse de acuerdo con Iglesias, pidiendo expresamente «no satanizar a nadie«.
El socialista señaló que el «verdadero problema» es conseguir los votos necesarios para que pueda fraguarse ese pacto que arrebate la Comunidad a Isabel Díaz Ayuso.
Los socialistas tienen claro cuáles son los bastiones de voto de la izquierda y de ahí que Gabilondo ya se haya adelantado en precampaña a sus rivales de Unidas Podemos y Más País y haya visitado Getafe, Fuenlabrada, Parla, Móstoles o Alcorcón, donde el 4-M se juegan mucho.
La ‘marca Pedro Sánchez’ y la del resto de ministros se seguirán movilizando en campaña para no dejar solo a su candidato. Los socialistas también culpan a Ayuso de que la celebración de los comicios el próximo 4 de mayo caiga en un martes no lectivo, pero laboral. «Esto complica aún más el que la gente pueda ir a votar, sobre todo, en barrios donde existen situaciones difíciles», señalan.
Los datos en este empiece de campaña no son buenos para la izquierda y los socialistas, conscientes de ello, intentarán remontar llamando a la movilización de su electorado.