La ocupación hotelera caerá a la mitad en agosto
La patronal de los hosteleros malagueño calcula un 42% de ocupación en agosto en la Costa del Sol, lo que refleja la situación del turismo nacional
La Costa del Sol, uno de los principales destinos turísticos de España, verá reducido su volumen habitual de visitantes debido al escenario que deja la pandemia de coronavirus. Una situación que refleja a qué se enfrenta el sector turístico en los próximos meses. Según los hoteleros locales, se llegará a una media del 36,3% de ocupación en julio, cuando lo habitual es rozar la totalidad de las plazas disponibles.
Según la patronal de los empresarios hoteleros, Aehcos, en agosto mejorarán ligeramente las cifras de clientela hasta el 42,7%. El organismo ha informado este viernes a través de un comunicado que entre los establecimientos que ya están abiertos y los que se sumarán de aquí al final de mes se llegará a un total de 155 hoteles disponibles, con 43.215 plazas disponibles.
Los datos «no son nada esperanzadores», indica la patronal de los hoteleros malagueños, que representa a un total de 348 establecimientos asociados con un total de 88.423 plazas en la provincia malagueña.
Del total de visitantes, la entidad calcula que un 16% serán turistas extranjeros que vendrán en julio; en agosto, el porcentaje crecerá en diez puntos hasta el 26%. Por zonas, en julio la ocupación más alta se espera en las localidades de Estepona (43,9 puntos), Benalmádena (43,2), Málaga capital (43,05) y Marbella (40,2), mientras que la más baja será la de Torremolinos (22,9 %.
El impacto en las grandes ciudades
El complicado escenario del turismo se traslada a otras ciudades, en especial las que acumulan mayores cifras de población dada la incertidumbre que sigue generando la propagación del coronavirus. Barcelona, por ejemplo, comenzó julio con solo un 17% de los hoteles abiertos, según datos del sector local; en Madrid, la patronal de estos empresarios criticó recientemente el plan de impulso presentado por el Gobierno por «insuficiente».
Según cifras de la asociación nacional Hosteltur, los hábitos de consumo también han camnbiado tras la crisis. Las preferencias para los turistas seguirán siendo las grandes cadenas de hoteles (un 37% de los encuestados en su último informe), mientras que ganan terreno los apartamentos vacacionales (22,5%) y las visitas a familiares o amigos (13,3%).