La ocupación de las UCI de Cataluña se acerca a la barrera de los 500 pacientes
El Departamento de Salud notifica 10 nuevos ingresos en las áreas de críticos de los hospitales, un día después de suspender todas las operaciones no urgentes
Personal sanitario del Hospital Parc Taulí de Sabadell (Barcelona) trabaja en la UCI para enfermos de COVID-19. EFE/Quique García
La presión hospitalaria en Cataluña continúa empeorando como consecuencia de la cuarta oleada de contagios que ha desencadenado la variante delta del coronavirus. La ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) se ha incrementado este domingo hasta los 490 pacientes críticos. Son 10 más que la jornada anterior.
La comunidad autónoma cada vez está más cerca del umbral de los 500 ingresados en las áreas de críticos, que marca la situación crítica del sistema sanitario catalán. La previsión de la Generalitat es que los datos sigan elevándose durante al menos nueve días, por lo que ya decretó el sábado la suspensión de toda la actividad hospitalaria que no sea urgente, incluidas las operaciones.
La tensión en el sistema sanitario también se ha sentido con fuerza en la planta de los hospitales. Después de una jornada de ligero respiro, los ingresos se han vuelto a incrementar en las últimas 24 horas hasta alcanzar un total de 2.132 personas hospitalizadas en toda la comunidad.
Aunque el perfil de los ingresados es más joven que en las anteriores oleadas, el incremento de la presión hospitalaria ya se está traduciendo también en un aumento de la mortalidad. En la última semana han fallecido 86 personas a consecuencia de la Covid-19 en Cataluña, un dato que contrasta con las 14 de la primera semana del mes.
Los indicadores empiezan a remitir poco a poco en Cataluña
A pesar de la tensión acumulada en los hospitales, los indicadores epidemiológicos muestran una luz al final del túnel. Todas las estadísticas muestran un cambio de tendencia en el avance del coronavirus, después de la explosión de contagios entre los más jóvenes de las últimas semanas.
El síntoma principal es la reducción de la incidencia acumulada que se ha reducido hasta los 1.197 casos por cada 100.000 habitantes, lo que supone 34 puntos menos que el sábado. En todo caso, el número representa cuatro veces el nivel de riesgo extremo establecido por el Ministerio de España. Cataluña es la comunidad más afectada y casi dobla la media nacional.
La caída de la incidencia es una consecuencia de la reducción de los contagios. En las últimas 24 horas se han notificado 3.644 nuevos casos positivos, por debajo de la media alcanzada a lo largo de la semana, en la que se han sumado 43.036 personas a las listas de infectados.
La edad media de los nuevos infectados es de 32,29 años, mientras que el 80% de los infectados han sido alcanzados por la variante delta del coronavirus, originaria de la India, que es más contagiosa y resistente a las vacunas cuando se ha administrado solo la primera dosis.
La velocidad de los contagios se ralentiza en Cataluña
Las buenas noticias siguen instaladas en la velocidad de propagación del virus (Rt) que mantiene su tendencia de recuperación. Este domingo se ha instalado en los 0,94 puntos, una centésima menos que el día anterior. Es decir, cada vez que se contagia un centenar de personas, transmite la enfermedad a otras 94. Por debajo de 1, se considera una fase de remisión de la pandemia.
También ha continuado con su mejoría el índice que mide el riesgo de rebrote (EPG), que ha recortado otros 46 puntos en las últimas 24 horas hasta un total de 1.099. En todo caso, todavía sigue en un nivel de alerta.
