La Generalitat da un paso atrás con la ampliación de El Prat tras difundirse el proyecto
El Gobierno de Cataluña se aferra a la confección del Plan Director para sortear las críticas de los grupos ecologistas por el impacto de las obras en La Ricarda
La polémica ampliación del aeropuerto de El Prat va cogiendo forma. Aena ha presentado este viernes un borrador, que confirma que finalmente las obras impactarán sobre el espacio natural protegido de La Ricarda. Sin embargo, desde la Generalitat han advertido que el proyecto todavía no está cerrado.
Los negociadores del Govern han afirmado que la reunión de hoy de la Comisión de Coordinación Aeroportuaria de Cataluña se ha saldado sin novedades, ya que la ampliación de la tercera pista del aeródromo se materializará mediante el Plan Director que aún no se ha definido, según ha publicado la Agencia EFE.
Los dirigentes catalanes se desvinculan así de las críticas vertidas por las organizaciones ecologistas y por el propio Ayuntamiento de Barcelona, que han lamentado que la puesta en marcha de este nuevo ‘hub’ internacional de transporte repercuta sobre la flora y la fauna protegida.
El documento presentado por Aena reconoce abiertamente que las obras afectarán a las zonas de la Red Natura 2000. Sin embargo, desde la Generalitat apuntan a que no se habla específicamente de la laguna de La Ricarda, por lo que nada ha cambiado desde el inicio del verano cuando se sentaron las bases del proyecto.
La Generalitat ha dejado en el aire la solución técnica con la que pretenderán sortear el impacto medioambiental de las obras en El Prat, que deberán pasar por la supervisión de la Comisión Europea para ponerse en marcha. Es una condición imprescindible fijada por todas las administraciones para que las obras comiencen.
La Generalitat recibe una lluvia de críticas de las formaciones ecologistas
La publicación del informe de Aena ha desencadenado una lluvia de críticas contra la Generalitat, que se comprometió públicamente a llevar a cabo la ampliación de El Prat sin impactar en el medioambiente. Unas condiciones que también ha aceptado la vicepresidenta de Transición Ecológica, Teresa Ribera.
Sin embargo, la revelación del contenido del proyecto ha provocado un fuerte rechazo en el equipo de gobierno de Ada Colau. El teniente de alcalde de Urbanismo de Barcelona, Janet Sanz, ha acusado al Govern de «mentir» sobre el impacto real de las obras.
«La Generalitat nos ha estado mintiendo, porque nos dijo que la posible afectación de La Ricarda se iba a discutir más tarde, pero no», ha indicado Sanz en una entrevista en TV3.
Los reproches también se han repetido desde el Ayuntamiento de El Prat de Llobregat. El alcalde, Lluís Mijoler ha acusado tanto al presidente catalán, Pere Aragonès, como a su número dos, Jordi Puigneró, de engañar a la ciudadanía sobre el proyecto, que tiene como objetivo «destruir La Ricarda de forma clara y evidente«