«La evidencia científica apunta a que la Covid-19 fue desarrollada en un laboratorio»
Los investigadores estadounidenses Richard Muller y Stephen Quay aseguran que el genoma refuerza la teoría de una fuga accidental del coronavirus en un laboratorio de Wuhan
La teoría de que la pandemia del coronavirus se originó de forma accidental en un laboratorio de China continúa cobrando fuerza, también entre la comunidad científica.
Dos investigadores han apuntado ahora que los datos sobre el genoma de la Covid-19 demuestran que la enfermedad es resultado de la acción del hombre, lo que refuerza la tesis planteada por los servicios de inteligencia de Estados Unidos y de Reino Unido.
El profesor de física de la Universidad de Berkeley, Richard Muller, y el director ejecutivo de la compañía biofarmacéutica Atossa Therapeutics, Stephen Quay, han llegado a la conclusión de que la huella genómica del virus sugiere una intervención humana, a pesar de que no haya un rastro claro de su manipulación.
«La evidencia científica apunta a la conclusión de que el virus fue desarrollado en un laboratorio», han afirmado en una columna escrita para The Wall Street Journal.
Los dos científicos han justificado su hipótesis en la dificultad de que un virus haya evolucionado de esta manera en la naturaleza. La Covid-19 es fruto de una combinación poco habitual de aminoácidos de arginina, conocida científicamente como doble CGG, cuya presencia es muy infrecuente. Sin embargo sí que es posible conseguir este resultado de manera artificial.
«Un microbiólogo puede aumentar enormemente la letalidad de un coronavirus al empalmar una secuencia especial en su genoma en una ubicación privilegiada. Hacer esto no deja rastro de manipulación», han expresado los dos analistas.
Muller y Quay han explicado que desde 1992 se han realizado al menos 11 experimentos diferentes dirigidos a añadir una secuencia especial de un virus a través de la recombinación de su genoma. Unos antecedentes que abren la puerta a que realmente la Covid-19 se expandiera como resultado de una fuga accidental en el Instituto de Virología de Wuhan.
«El método común de los virus que recogen nuevas habilidades, llamado recombinación, no puede funcionar aquí. Un virus simplemente no puede recoger una secuencia de otro virus si esa secuencia no está presente en ningún otro virus», han esgrimido.
Los científicos sugieren que se han ocultado las evidencias sobre la Covid-19
Los dos científicos han retado a los defensores de la teoría de que la Covid-19 tiene un origen natural a que expliquen por qué cuando el virus mutó escogió su combinación menos favorita, el doble CGG. «Sí, podría haber sucedido al azar, a través de mutaciones. Pero, ¿cree usted eso?», se han preguntado.
Muller y Quay incluso han denunciado que estas evidencias se han tapado para tratar de desviar la atención sobre una posible implicación del ser humano en la creación de la pandemia. «¿Se omitió con la esperanza de que nadie se diera cuenta de esta evidencia del origen de la ganancia de función?», han teorizado.
Sus averiguaciones se producen después de que el Gobierno de Joe Biden haya decidido poner en marcha una investigación para tratar de indagar precisamente sobre el origen de la Covid-19, a raíz de que hiciera público un informe de inteligencia que había identificado a varios investigadores del Instituto de Virología de Wuhan que habían enfermado ya en noviembre de 2019.
Estados Unidos ha recelado de la investigación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que envió una delegación de científicos hasta la localidad china precisamente para determinar el nacimiento natural del coronavirus. Los servicios de inteligencia de Reino Unido también se han sumado a las averiguaciones porque sospechan que el Gobierno de China ha tratado de ocultar los datos.