La EMA ve cada vez más cerca la autorización de la tercera dosis de la vacuna
La EMA abre la puerta a la vacunación en las residencias, al colocar a las personas mayores como posibles candidatos a la dosis de refuerzo
España ya ha dado luz verde a la administración de la tercera dosis de la vacuna del coronavirus sobre los pacientes inmunodeprimidos, sin embargo los reguladores sanitarios todavía no se han pronunciado. La Agencia Europea del Medicamento (EMA) ha vuelto a dejar el veredicto en el aire, aunque ha reconocido que su autorización está al caer.
Los científicos europeos continúan analizando los datos de los ensayos clínicos que han proporcionado las farmacéuticas pero la resolución definitiva está cada vez más cerca. «La evidencia es más clara sobre la necesidad de considerar dosis adicionales», ha admitido ahora el jefe de la estrategia sobre las vacunas de la institución, Marco Cavalieri.
La decisión definitiva tendrá un importante impacto sobre España. El Ministerio de Sanidad hasta ahora solo ha aprobado el uso de la vacuna de refuerzo en los pacientes en tratamiento de cáncer o las personas que se han sometido a un trasplante de órganos debido a sus bajos niveles de anticuerpos. Pero cada vez son más los colectivos que piden entrar en la estrategia.
La EMA ha abierto la puerta a que la autorización se producirá tanto para los pacientes inmunodeprimidos como para los más mayores. Cavaliere ha colocado sobre el foco a «las personas que pueden responder mal a la vacuna, como aquellos con sistemas inmunológicos severamente deprimidos o algunos pacientes de edad avanzada».
Las residencias se aferran a la EMA para exigir la vacuna de refuerzo
La patronal de residencias lleva semanas advirtiendo sobre la necesidad de inocular una dosis de refuerzo entre sus usuarios, después del incremento de los contagios que se ha producido en verano durante la quinta oleada. A pesar de que prácticamente todos los residentes tienen la pauta completa, la enfermedad ha vuelto a entrar en el sistema.
Algunas comunidades también presionan a Sanidad para que inicie la tercera vacunación en los centros. Castilla La-Mancha lo propuso formalmente en la última reunión del Consejo Interterritorial de Salud con el resto de las autonomías, mientras que Andalucía ha adelantado que actuará en función de lo que demuestren sus propios estudios.
El Ministerio de Sanidad ha encargado una investigación al Instituto Carlos III precisamente para conocer el grado de inmunidad que presentan los usuarios de las residencias que fueron el primer grupo en acceder a la vacunación. El objetivo del estudio es determinar cómo han evolucionado sus anticuerpos tras más de medio año desde que se inició la inmunidad.
La decisión de la EMA también puede ser decisiva para otros colectivos, como los pacientes que actualmente están sometidos a un tratamiento de hemodiálisis y que también han exigido formar parte de la estrategia nacional de refuerzo debido a su situación médica.
La EMA advierte de que la prioridad es alcanzar primero a toda la población
En todo caso, los reguladores sanitarios han advertido que antes de activar de forma generalizada la tercera dosis de la vacuna, es necesario alcanzar al grueso de la población. «Desde un punto de vista sanitario, la prioridad debe estar en asegurarse de que el número máximo de personas estén completamente vacunada«, ha remarcado Cavalieri.
España ha logrado administrar las dos primeras dosis ya a más de 34,7 millones de habitantes, lo que representa el 73,2% de la población diana, aunque el objetivo del Gobierno pasa por llegar al 90% debido al impacto de la cepa Delta. Todavía tienen que pasar más de un millón de adolescentes por los servicios sanitarios para completar su pauta.
Los estudios que está realizando la EMA además no abarcan a todos los grupos demográficos. Los datos solo analizan el impacto de la dosis de refuerzo en los mayores de 16 años y transcurridos seis meses desde la segunda inyección. La decisión definitiva se producirá «en las próximas semanas».