La diplomacia poco convincente de Roger Torrent en Suiza
Roger Torrent presume de una reunión con una integrante de la oficina del comisionado de Derechos Humanos de la ONU y difunde con cuentagotas su agenda suiza
Si el procés siempre ha sido en buena parte construcción de un relato, es decir, cuestión de imagen, más aún en esta fase en que el bloqueo de la investidura mantiene a la política catalana en un incierto impasse que ya va para cuatro meses. Este miércoles, el presidente del Parlament, Roger Torrent, ha iniciado una visita de dos días a Ginebra para «defender los derechos políticos de todos los diputados y denunciar las injerencias ilegítimas del Estado en el Parlament», según rezaba, en referencia a la aplicación del 155 y las medidas decididas por el juez Pablo Llarena, el comunicado difundido por la cámara catalana. Sucede que, si se trata de incidir en el relato, por el momento la poco convincente puesta en escena no le ayuda, ni tampoco la escasa transparencia de su agenda suiza.
El Parlament informó el martes de que Torrent se reuniría con «miembros de las Naciones Unidas» y que también mantendría «contactos con diversos cargos electos» suizos, sin más precisión. Pese a que el encuentro no constaba en la agenda de reuniones de la ONU, este miércoles por la mañana, Torrent se reunió con una integrante de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH).
Si hacemos caso de la versión de Torrent de la cita, Rishmawi tomó nota de su denuncia y poco más
Claro que el Alto Comisionado, Zeid Ra’ad Al Hussein y su número dos, Kate Gilmore, ni siquiera estaban en el país, con lo que el encuentro fue con la responsable de la rama de Estado de Derecho, Igualdad y No Discriminación del ACNUDH, la palestina Mona Rishmawi.
El presidente del Parlament calificó la reunión de «muy positiva», aunque si hacemos caso de su versión de la cita, Rishmawi tomó nota de su denuncia de la «vulneración de derechos fundamentales que se está produciendo en Cataluña», y poco más. En la nota de prensa que el Parlament difundió sobre la reunión apenas se destaca que se acordó «mantener canales de comunicación abiertos» y que Torrent y Rishmawi coincidieron «en el hecho de que los conflictos políticos se tienen que resolver políticamente».
La oficina del ACNUDH no emitió ningún comunicado sobre la reunión, de la que ni siquiera hay una foto
Más allá de esas generalizaciones, poco se sabe, tanto del encuentro -celebrado, según el Parlament, «en una de las sedes del ACNUDH- como del resto de la agenda de Torrent en Suiza. La oficina del ACNUDH no emitió ningún comunicado sobre la reunión, de la que ni siquiera hay una foto. La imagen que difundió la cámara catalana corresponde a la comparecencia ante los medios de Torrent en solitario tras el encuentro, que se produjo en plena calle, en la plaza de las Naciones, frente a la sede ginebrina de la ONU.
Por lo demás, Torrent ha anunciado reuniones con diputados suizos, relatores especiales de la ONU y entidades «dedicadas a la defensa de derechos fundamentales», sin más detalle. Hoy jueves, tiene previsto reunirse en el ayuntamiento con el alcalde de Ginebra, Rémy Pagani, que pertenece a la coalición de izquierda anticapitalista Ensemble à Gauche y es partidario del derecho de autodeterminación. Nada más se ha precisado del resto de su agenda.
Por ahora, los esfuerzos diplomáticos del presidente del Parlament recuerdan a los del ex conseller Raül Romeva, tanto por escasa transparencia que los caracteriza como por la cuanto menos aparente modestia de los resultados.