La CUP marca la agenda de Mas
El president se ve obligado a anular su cumbre independentista por la negativa de Fernández a asistir
En un momento de lucidez, a Mas se le ocurrió una de sus felices ideas: exaltar a la CUP para ningunear a ERC, con quien no mantiene buenas relaciones. Tras la consulta alternativa del 9 de noviembre, el presidente de la Generalitat se abrazó efusivamente a David Fernández, líder de la CUP. Después, Fernández fue elegido presidente de la comisión que investiga la corrupción de los Pujol y ahora es un político bastante conocido y bien valorado.
Todo era una artimaña de Mas para que Oriol Junqueras no destacase demasiado. Pero ahora, como con tantas otras cosas, esa estrategia se ha vuelto contra el president. Y lo ha hecho hasta tal punto que es la CUP quien marca la agenda de Mas.
La polémica lista sin políticos
El presidente quería celebrar este viernes lo que él llama una cumbre, que en realidad era una reunión con los partidos y las asociaciones independentistas para debatir del polémico tema de la lista única sin políticos.
Una candidatura sin presente en la que estarían de acuerdo Òmnium Cultural, la Asamblea Nacional Catalana, ERC y la CUP. Es decir, todos menos quizá la Asamblea de Municipios por la Independencia, que al fin y al cabo está compuesta por alcaldes, que son políticos profesionales, y el propio Mas, que lleva demasiado tiempo picando piedra en el independentismo como para verse relegado en sus aspiraciones de ser reelegido.
La CUP rechaza las «cumbres-espectáculo»
Pero esa reunión no ha podido celebrarse, porque la CUP no ha querido asistir. Los de la formación de Fernández han rechazado sumarse a «cumbres-espectáculo» como «ya ocurrió con la preparación del 9-N», aunque sí se han mostrado dispuesto a negociar siempre que sea de una manera discreta y «responsable».
En consecuencia no habrá reunión este viernes. Quizá las cosas se puedan enderezar la semana que viene, pero en todo caso ya no queda mucho tiempo para resolver todo este lío de la famosa lista sin políticos profesionales. La CUP quiere decidir antes del 18 de julio si se suma a esa candidatura o si se presenta por su cuenta a los comicios del 27 de septiembre.
Fecha límite: el 3 de agosto
Unas elecciones que, hoy por hoy, están en el aire. Mas puede optar ante la complejidad de la situación por no convocarlas, pues aún le quedan dos años de legislatura. Los interrogantes se despejarán el día 3 de agosto, que es cuando expira el plazo para que el president firme el decreto electoral.