La batería de impuestos de Sánchez recaudará 9.700 millones más
Los técnicos de Hacienda calculan que se conseguirían 14.100 millones con la regulación del gasto público y la subida del IRPF a las grandes fortunas
La subida de impuestos contra las grandes empresas de Pedro Sánchez ya tiene cifras. El presidente del Gobierno confirmó este martes en el Congreso un incremento del Impuesto de Sociedades del 10% al 15% para las compañías, la medida principal de la batería de tributos que prepara el ejecutivo socialista con la que los técnicos de Hacienda calculan que se recaudarán 9.700 millones de euros.
El sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) cree “como mínimo” se recaudaran estos 9.700 millones. La mayor parte (4.000 millones) procederá de las empresas con una facturación superior a ocho millones de euros anuales, que verán como su tipo del Impuesto de Sociedades real será del 15% –tienen derecho a varias deducciones que hasta ahora lo dejaban en el 10% –.
Otros 2.000 millones procederán de gravar las transacciones financieras internacionales. Presentada el pasado marzo, la propuesta socialista habla de un tributo del 0,1% con carácter general y del 0,01 para las operaciones con derivados. No será el único impuesto a la banca, pues Sánchez planea un tributo específico para el sector con el que se recaudarán 1.000 millones.
Nuevos impuestos contra las tecnológicas y el diésel
Mientras, Gestha cree que se podrán recaudar 600 millones procedentes de compañías digitales con la conocida tasa Google, que entrará en vigor de 2019 con el objetivo de que se tribute por la publicidad online, la venta de datos y la intermediación en plataformas digitales.
Menor será cantidad obtenida con los impuestos a favor del medio ambiente. Los técnicos esperan captar 600 millones con subidas como la tasa del diésel, que encarecería un 10% los repostajes con este tipo de carburantes.
Los 1.500 millones restantes procederían de una intensificación de la lucha contra el fraude fiscal.
Sin embargo, los técnicos aseguran que la recaudación podría ser todavía mayor. Hasta 14.100 millones se podrían conseguir de elevar el IRPF a las grandes fortunas y aumentar los tipos de la renta a grandes patrimonios (+1900 millones) y aplicar medidas de ahorro en el gasto público (+2.500 millones).