La ANC encara la Diada menos concurrida al grito de «no renunciamos a nada»
Las inscripciones están más del 20% por debajo de la asistencia registrada en 2017 y solo tres tramos de la Diagonal están llenos
La Asamblea Nacional Catalana (ANC) enfrenta la posibilidad de una Diada con la participación más baja que se recuerde. A falta de tres días para la concentración del 11 de septiembre en la Diagonal de Barcelona, la entidad soberanista cifra en 350.000 las inscripciones, por debajo de la asistencia de 500.000 registrada en 2017.
La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, afirmó también que hay 1.200 autocares completos que acudirán a Barcelona con manifestantes y que se han vendido 250.000 camisetas diseñadas para la Diada. De momento está más del 20% por debajo de su objetivo de 300.000 camisetas para recaudar 4,5 millones de euros.
Paluzie cerró así la semana previa a la Diada, que estuvo marcada por una campaña de última hora para elevar la participación, en la que incluso participaron Carles Puigdemont y Quim Torra. La presidenta de la entidad llamó a llenar la Diagonal para reivindicar «la república catalana».
Sin embargo, la web de la ANC muestra que sólo tres de los 38 tramos en los que se dividió la manifestación están llenos, mientras que en 35 las inscripciones siguen abiertas.
La ANC: «El objetivo de la independencia está más vivo que nunca»
Paluzie aprovechó la entrevista de 3/24 para confirmar que «el objetivo político de la independencia está más fuerte y vivo que nunca» y criticó «la represión política que tiene por objetivo que tengamos miedo y renunciemos» a los anhelos separatistas.
La Diada, organizada por la ANC y Òmnium Cultural (cuyos líderes, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, están en prisión), «es por la republica catalana y para decir al mundo, al Estado y a todo el mundo, que aquí no hemos renunciado a nada», agregó la líder de la entidad soberanista.
La ANC considera que una condena de los políticos independentistas acusados de rebelión «puede ser una oportunidad, pero tampoco puede ser una soga al cuello» para dar con la independencia de Cataluña.
«Si no hay una voluntad del Parlament, un Govern dispuesto y la movilización popular al mismo tiempo, puede que aquel no sea el momento», comentó Paluzie. La participación de la Diada podrá servir como un termómetro para que el independentismo valore su plan de acción.
Mientras llega el martes, el separatismo busca todas las vías para invitar a los catalanes a sumarse a la manifestación. Puigdemont y sus exconsellers firmaron un comunicado conjunto para recordar que la Diada se celebra «en unas circunstancias excepcionales», por lo que piden repetir «todos los éxitos» de las anteriores.