La AMB de Colau da 166 millones a empresas privadas
El organismo supramunicipal vincula la cifra a los servicios de transporte de gestión indirecta
Imagen de archivo de Ada Colau, alcaldesa de Barcelona / EFE
El Área Metropolitana de Barcelona, en su presupuesto de 991 millones de euros para este año 2022, cuenta con una partida de 166 millones en concepto de “otras subvenciones a empresas privadas”. Según fuentes oficiales del organismo supramunicipal, consultadas por Economía Digital, la aportación corresponde a los servicios de transporte de gestión indirecta.
La institución liderada por Ada Colau afirma que los citados servicios corresponden a las líneas no operadas por Transports Metropolitans de Barcelona, la firma pública que gestiona los itinerarios de metro y autobús de la capital catalana y algunas de las poblaciones del entorno más cercano.
En la documentación oficial del presupuesto, el AMB no muestra con claridad el listado de las empresas más beneficiadas por la financiación pública del transporte. Históricamente, el organismo es conocido por las maniobras de los partidos para colocar a cargos orgánicos como personal eventual. De hecho, a diferencia de la Generalitat o el mismo Ayuntamiento de Barcelona, el Área Metropolitana oculta el listado del personal de confianza de los representantes políticos.
400 millones en transferencias a organismos e instituciones
Los 166 millones ya citados forman parte de una cifra global de 400 millones, recogidas en el capítulo 4 del presupuesto (Transferencias corrientes). El segundo ámbito con mayor aportación es ATM con 158 millones. Seguidamente, aparece una horquilla de los 5 a los 20 millones para pagos a ayuntamientos, diputaciones, consejos comarcales, organismos autónomos del mundo local, sociedades mercantiles y organizaciones sin ánimo de lucro.
El catálogo de servicios impulsados desde el Área Metropolitana de Barcelona gira alrededor de ocho áreas: Espacio público, vivienda, residuos, medio ambiente, movilidad, transporte público, agua y laboratorio. Para controlar la gestión de todos estos departamentos, Ada Colau se acomoda en la figura del gerente (Ramon Torra) y el jefe de presidencia.
Esta última figura es Salvador Milà, exconsejero de ICV en el tripartito de Pasqual Maragall en la Generalitat. Milà y Torra tienen un sueldo anual de más de 110.000 euros, en el mismo rango que un consejero de la Generalitat o el mismo presidente Pere Aragonès.
El recurso de las subvenciones directas
En paralelo a las transferencias por la prestación de servicios, desde el año 2016 hasta la actualidad, Ada Colau ha destinado poco más de 28 millones de euros a subvenciones directas. Principalmente, los recursos han sido repartidos desde los departamentos de desarrollo económico, planificación estratégica y presidencia.
A modo de ejemplo, el 31 de diciembre del año 2020, el Área Metropolitana de Barcelona hizo un pago de 500.000 euros a repartir entre dos entidades (Asociación Mundial de las Grandes Metrópolis y MedCities) para la realización de actividades internacionales.
En lo que respecta al alcance geográfico, la institución supramunicipal defiende los intereses de la capital catalana y los 36 municipios de su órbita más cercana. Una extensión de 636 kilómetros cuadrados y 3,2 millones de habitantes. La vicepresidencia del AMB corresponde al alcalde de Cornellà de Llobregat, el socialista Antonio Balmón.
Inversión electoral de 200 millones en viviendas de protección oficial
Recientemente, a menos de un año de las elecciones municipales, Colau ha impulsado, desde el AMB, una inversión de 200 millones de euros para construir 1.100 viviendas de protección oficial en Barcelona y sus cercanías, durante los próximos cuatro años.
La mayor parte de estas poblaciones, con L’Hospitalet de Llobregat a la cabeza, forman parte del denominado cinturón rojo del PSC, desde los primeros consistorios democráticos. El desarrollo del proyecto urbanístico ha sido posible gracias a un acuerdo de financiación de 145 millones con el Banco Europeo de Inversiones.
La construcción de los pisos es la continuidad de una relación iniciada en 2019, momento en el cual, el BEI abrió varias líneas de financiación para proyectos de rehabilitación de edificios en los municipios miembros del Área Metropolitana de Barcelona.
