La alcaldesa socialista más importante de Cataluña defiende eliminar las clases en castellano
Nuria Marín, alcaldesa de l'Hospitalet de Llobregat y presidenta de la Diputación de Barcelona, defiende que los niños de su ciudad tengan el "máximo" de catalán en las aulas
La alcaldesa socialista de l’Hospitalet de Llobregat (Barcelona) y presidenta de la Diputación de Barcelona, Núria Marín, ha respaldado la eliminación del castellano en las escuelas catalanas, asegurando que «se tiene que aplicar la máxima inmersión y garantizar el máximo nivel de aprendizaje del catalán».
En el Hospitalet de Llobregat la mayoría de la población habla en castellano, por lo que ha defendido que los niños y niñas de su ciudad tengan el «máximo» de catalán en sus aulas, alegando que ya hablan castellano en la escuela, en el patio, y fuera del colegio en sus actividades. «No tenemos que preocuparnos por el castellano», ha insistido.
En este sentido, ha explicado en el Nueva Economía Fórum de este jueves que «tenemos que garantizar que tengan la máxima igualdad de oportunidades que los niños de otras ciudades», subrayando que si fuera alcaldesa de otra localidad igual pensaría de forma distinta. Además, ha asegurado que «es un error garrafal politizar la lengua».
Asimismo, ha destacado que la ley de inmersión es útil pero tiene que tener la flexibilidad para que los alumnos que «son diferentes» tengan «ayudas diferentes» para poder obtener una resultados iguales a otros alumnos.
Inmersión lingüística en Cataluña
Este nuevo modelo lingüístico prevé garantizar el uso del castellano en las aulas, en las que el catalán seguirá siendo «lengua vehicular», y da margen a los centros educativos a implementar el castellano en sus proyectos lingüísticos. El acuerdo alcanzado entre el PSC, ERC, Junts y En Comú Podemo, que modifica la Ley de Política Lingüística de 1998, llegó un día antes de que venciera el plazo para cumplir la sentencia judicial que obliga a impartir al menos un 25 % de las clases en castellano. No obstante, los postconvergentes se desdijo a última hora.
El pasado dos de abril unas 1.700 personas, según la Guardia Urbana –8.000 según los organizadores–, se manifestaron en Barcelona para rechazar el cambio de la ley de política lingüística y exigir que la inmersión en catalán en las escuelas.
Por su parte, Josep González Cambray, el conseller de Educación, ha instado en repetidas ocasiones a las escuelas e institutos a seguir aplicando su propio modelo lingüístico de centro, a la vez que ha afirmado que asume la responsabilidad de ello. Sin embargo, desde la fiscalía se ha apuntado a que la responsabilidad de las actuaciones en los centros educativos recaen en las direcciones, lo que las deja en una posición difícil a la hora de defender el modelo de inmersión lingüística y no impartir el 25% de materias en castellano.