JxCat y ERC vuelven a despreciar a Felipe VI en un acto oficial
El gobierno municipal de ERC y JxCat en el municipio de Tremp no acudirá a un acto en la academia militar de Talarn por la presencia del monarca
El independentismo institucional volverá a despreciar este viernes al rey Felipe VI en un acto oficial. El gobierno municipal de la localidad leridana de Tremp, integrado por Junts per Catalunya (JxCat) y ERC ya ha anunciado que no acudirán esta noche a la entrega anual de despachos militares a la nueva promoción de sargentos de la academia situada en el municipo colindante de Talarn en protesta por la presencia del monarca, que presidirá el acto.
La nueva alcaldesa del municipio colindante con Talarn, Tremp, Pilar Cases, de ERC, ya ha informado al responsable de la academia militar de que ningún integrante de su ejecutivo acudirá al acto porque Felipe VI no se reunió en su día con la expresidenta del Parlament Carme Forcadell y su sucesor al frente de la cámara catalana, Roger Torrent«.
«No queremos ir a un acto donde esté este personaje», remató. No será la única en plantar al Jefe del Estado. Otros concejales de Esquerra de municipios del entorno se han sumado al boicot, informa EFE.
Pulso por los lazos amarillos
El gobierno municipal de Tremp también se negó a retirar los lazos amarillos colocados en protesta por la prisión preventiva de los líderes independentistas procesados en el centro cultural La Lira, donde tenía que celebrarse este jueves el tradicional concierto que la academia militar de Talarn celebra cada año en vísperas de la entrega de los despacho, por lo que los militares optaron por suspender el acto.
El año pasado el monarca no acudió a la entrega de despachos, y sí lo hizo el entonces alcalde de Tremp, Joan Ubach, del Pdecat. Felipe VI sí presidió la entrega anual en las ediciones de 2015 y 2017. En esta última, la representante de la Generalitat en el acto fue la entonces consellera de Presidencia y portavoz del govern Neus Munté.
En cambio, esta vez, siguiendo los criterios que se han convertido en norma el último año cuando se trata de coincidir con el Rey, la representante del gobierno catalán tendrá un perfil más bajo. Se trata de su delegada en el Alto Pirineo y Aran, Rosa Amorós.
Además, por primera vez desde 1980, el representante de la Generalitat no va a entregar al número uno de la promoción la reproducción de la espada de Jaime I el Conquistador, que fue rey de Aragón y conde de Barcelona, un gesto que se acordó como símbolo de los lazos entre la Generalitat y el Ejército y de la presencia de la academia en Talarn. Esta vez, en lugar de la espada, Amorós va a entregar el libro «Imago Cataloniae Mapas de Cataluña, Huellas de la Historia», una colección de mapas antiguos del territorio catalán, han informado fuentes del Ministerio de Defensa.
Cuarta visita de Felipe VI a Cataluña en 2019
La de este viernes es la cuarta visita del Rey en lo que va de año a Cataluña, tras haber asistido a finales de febrero a la inauguración del Mobile World Congress (MWC), a la apertura del Salón del Automóvil el 10 de mayo, y, el 27 de junio, a la ceremonia de entrega de premios del Salón Internacional de la Logística (SIL).
En las dos primeras ocasiones coincidió con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, pese a la evidente falta de sintonía, aunque en el primero de esos desplazamientos, el president sí plantó a Felipe VI en otro acto de los que conformaban la agenda del monarca: un homenaje a Mariano Puig, expresidente del grupo Puig, al que no acudió ningún representante de la Generalitat. Ni Torra ni ninguno de sus consellers asistieron tampoco a la Noche de la Logística.