Junts se moviliza en redes para atacar el giro de Junqueras
Perfiles destacados del partido de Puigdemont se conjuran con las bases para defender la vía unilateral frente al guiño del reo por sedición de ERC con el diálogo Estado-Generalitat
Pedro Sánchez y Oriol Junqueras durante la sesión constitutiva en el Congreso. Foto: EFE
El gesto de Oriol Junqueras con Pedro Sánchez por los indultos, al asegurar que la medida de gracia ayuda a «aliviar el conflicto» y «paliar el dolor de la represión» con una apuesta por la vía dialogada frente a la unilateral ha enfadado a Junts, que se ha movilizado en redes para dinamitar a ERC.
La posición de Junqueras ha supuesto todo un desafío a la vía frentista de Junts, que se ha mostrado beligerante con los indultos al considerar que lejos de resolver el problema de «represión», lo enmascara. El partido ha movilizado a la maquinaria digital para desgastar a ERC por su apuesta por el diálogo.
El partido ha salido en tromba a atacar a Junqueras. El propio expresidente Quim Torra ha reprendido «con todo el respeto» al reo por sedición: «El 1-O ejercimos el derecho de autodeterminación democráticamente y pacíficamente (…) Yo no renuncio ni renunciaré nunca, porque sabemos que es la única vía posible».
También activistas y perfiles del ala dura de Junts han salido en tromba a atacar la posición de Junqueras. La diputada Aurora Madaula ha asegurado que «personalmente no renunciará nunca a ninguna vía que desde la política y la democracia pueda defender y conseguir la independencia. Negociación y pactos, sí, renuncia y claudicación, nunca«.
Contra la complicidad Aragonès-Sánchez también se ha cargado. «Tres años de presos políticos y exiliados, durante los cuales no ha dejado de crecer el número de represaliados ni los millones de expolio criminal que el Tribunal de Cuentas les pretende imponer», ha remarcado el exdiputado Josep Costa.
También desde el mundo de Twitter afín a Junts se ha atacado al reo por sedición. La tuitera Cristina Gallifantes ha acusado de «ilícito» e «indigno» el «olvidar que miles de persones han arriesgado tanto o más que tú, y despreciar su sacrificio diciendo que ‘donde dije digo, digo Diego». Además, le ha acusado de «decirle al Estado que la represión funciona».
El ruido general del entorno de Junts también trasciende hacia perfiles más enfocados en la base del partido. Según han explicado desde Junts, en algunos círculos internos de la militancia se ha pedido a los afiliados más abocados al activismo en redes que se movilicen: «Dadle mucho al tema, please«.
Concejales, militantes rasos y cuadros territoriales han salido en tromba a criticar tanto el guiño de Junqueras como las apelaciones a un «nuevo tiempo» de Aragonès y Sánchez, que han coincidido este lunes en el acto de Foment del Treball donde se condecoraba a Javier Godó, editor de La Vanguardia, en el marco de los 250 años de la patronal catalana.
Junts se erige como defensor de la unilateralidad
Más institucional ha sido la portavoz de Junts, Elsa Artadi, que ha recordado sobre las palabras de Junqueras en la carta enviada al Ara y a La Sexta –donde destaca como «no viables» otras vidas distintas a la pactada– que el independentismo tiene la «obligación» de explorar todas las vías, aunque el diálogo «facilitaría la vida de mucha gente».
«Es tan evidente esto como la evidencia de la unilateralidad del Estado como reacción al derecho de autodeterminación», ha defendido Artadi, que ha lanzado un dardo a ERC recordándole que en su ponencia política no ha renunciado a la confrontación con el Estado, como tampoco lo han hecho Junts y la CUP.
Los republicanos dan impulso a la vía dialogada con el Gobierno PSOE-Podemos tras la investidura de Pere Aragonès, Ejecutivo que comparte con Junts y cuenta con el frágil apoyo de la CUP. ERC trata así de marcar perfil propio, tras los embistes desde el mundo posconvergente, que hacen de la confrontación con el Estado su mejor baza política.
