Junts y la CUP presionan a ERC con su enmienda a la totalidad a los presupuestos de Sánchez
Los socios de Aragonès en Cataluña, cuyo peso es prescindible en Madrid para el PSOE, instan a los republicanos a seguir sus pasos
Más presión para ERC, que todavía no ha decidido cuál será su postura ante la tramitación de los presupuestos de 2022. Junts per Catalunya y la CUP han anunciado casi al unísono que presentarán una enmienda a la totalidad a las cuentas que el Gobierno prepara para el próximo año.
La portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, ni siquiera ha ocultado su intención de que ERC se sume a la estrategia de la CUP y los posconvergentes. Les ha invitado a presentar su propia enmienda a la totalidad, con el pretexto de la unidad que tanto ansía el partido de Puigdemont ante su irrelevancia en Madrid: «Cuando vamos juntos somos más fuertes».
El partido ha asegurado que Sánchez no «es creíble» cuando presenta unas partidas presupuestarias beneficiosas para Cataluña por sus «constantes incumplimientos». Pese a las críticas, el portavoz en el Senado, Josep Lluís Cleries, ha asegurado que estarán «para seguir negociando» hasta «el último momento antes de la votación de las enmiendas a la totalidad».
La CUP pone la excusa de la «autodeterminación»
Una posición similar ha defendido la CUP. Los anticapitalistas, que inicialmente aseguraron que no presentarían una enmienda a la totalidad de los presupuestos, han lamentado que sea «imposible llegar a acuerdos con un gobierno que sistemáticamente niega el derecho de autodeterminación y se muestra incapaz de desplegar políticas de izquierdas».
Mireia Vehí ha reprendido a los partidos del Gobierno de España por no aplicarse suficientemente en un giro social: «Los presupuestos sociales y las políticas democráticas son un freno a la extrema derecha. Cuando la izquierda no hace su trabajo, abona el camino a la extrema derecha».
Los republicanos siguen sin aclarar cuál será su posición ante la tramitación de las cuentas del PSOE. Las otras dos formaciones independentistas se han a tumbarle a Pedro Sánchez las cuentas, o al menos a intentarlo. Unos partidos cuyo peso es exiguo aritméticamente hablando, aunque tienen un gran valor al ser los socios imprescindibles de ERC en Cataluña.
Junts y la CUP, irrelevantes en la suma de mayorías
Pedro Sánchez únicamente necesita del apoyo seguro de ERC y del PNV, cuya mayoría le facilitaría la aprobación de las cuentas que cuentan de partida con el voto favorable del PSOE y Unidas Podemos. Tan solo haría falta que algunos de los minoritarios, como Teruel Existe, PRC, Más País o Compromís sumaran sus escaños para terminar dando al presidente la ansiada mayoría.
Ni siquiera son necesarios los votos de Bildu, aunque han tejido una fuerte alianza estratégica con ERC, y aspiran a convertirse en una alternativa útil a un PNV que podría perder el monopolio de fuerza vasca útil para conseguir mejoras en el autogobierno del País Vasco y de Navarra.
La otra fuerza independentista en el Congreso, el Pdecat, no presentará enmienda a la totalidad a los presupuestos. Unos diputados que podrían venirle muy bien a Pedro Sánchez para terminar de redondear la suma entre ERC, PNV y un potencial apoyo de Bildu.