Junqueras, pendiente de su libertad para asaltar la Generalitat
ERC contiene el aliento antes de que el Supremo decida si excarcela a su líder
Oriol Junqueras está citado este jueves a las 10.30 horas en la sede del Tribunal Supremo. Tres magistrados de la Sala de lo Penal determinarán si su recurso para salir en libertad debe atenderse o si, por el contrario, debe permanecer encarcelado, tal y como reclama la Fiscalía. El líder de ERC permanece en Estremera (Madrid) en prisión preventiva desde el pasado 2 de noviembre por los delitos de rebelión y por el riesgo de reiteración delictiva y fuga. Esta medida impidió a Junqueras participar en la campaña de su partido y le mantiene alejado de las negociaciones con Junts per Catalunya para determinar la composición del próximo Gobierno de la Generalitat.
Ningún dirigente de Esquerra se atrevía este miércoles a realizar un pronóstico optimista sobre su posible puesta en libertad. Tampoco su abogado, Andreu Van den Eynde, quiso alimentar esperanza alguna y admitió que la resolución en la vista es «incierta». La defensa de Junqueras contempla su permanencia en prisión preventiva, pero al menos intentará su traslado a una cárcel catalana para que pueda acudir a los plenos del Parlament, incluso para ser investido presidente de la Generalitat si es que finalmente Carles Puigdemont desiste de su aspiración.
La decisión del Supremo será crucial en la sorda batalla entre Junts per Catalunya y ERC por pesidir la Generalitat
La decisión del Supremo, de hecho, será crucial en la sorda batalla que Junts per Catalunya y ERC mantienen para perfilar la nueva Generalitat. De cara a la galería, ERC sostiene que sólo trabaja con la hipótesis de investir a Puigdemont, aunque los republicanos ya han pedido a Junts per Catalunya que aclaren «cómo se hará efectiva» la restitución de Puigdemont en el cargo. Existen muchas dudas sobre ello y ERC no dudará en postular a su líder para el cargo si la justicia opta por excarcelarlo.
Los futuros socios soberanistas se resisten a abrir fuego en público. Mantienen el compromiso de llevar con discreción sus conversaciones, las cuales no se acelerarán definitivamente hasta la próxima semana. Los fugados a Bruselas, con Puigdemont a la cabeza, deben clarificar si regresan a Barcelona o no para tomar posesión de su acta de diputado. «Este tema está abierto», reconocieron fuentes del PDeCAT. De momento, los ex consejeros no han querido dar ninguna pista sobre ello, ya que todo el mundo está pendiente del Supremo antes de dar un nuevo paso y continuar haciendo cálculos sobre la alianza independentista. En paralelo, las fuerzas constitucionalistas permanecen atentas al pulso entre soberanistas para comprobar si existe alguna posibilidad, por remota que sea, para forzar una alternativa.