El juez investigará los contactos de un asesor de Puigdemont con Rusia
El tribunal ha avalado la investigación sobre los vínculos de los asesores de Carles Puigdemont con emisarios del Kremlin ruso
La Audiencia de Barcelona ha avalado la investigación sobre los vínculos de los asesores de Carles Puigdemont con emisarios del Kremlin ruso a través de los cuales se intercambió, presuntamente información sobre el procés para desestabilizar a España y a la Unión Europea.
El tribunal ha rechazado el recurso de la Fiscalía y ha avalado la investigación de una operación de compraventa de petróleo entre compañías rusas y chinas vinculada a Josep Lluís Alay, asesor de Carles Puigdemont, ante las sospechas de que pudo ser «una pantalla de financiación ilegal».
El juez ha relacionado a Alay con el empresario ruso Alexander Dmitrenko, sobre quien, a su vez, pesan las sospechas de estar vinculado a los servicios de inteligencia rusos.
Según el auto, dicha operación de compraventa de petróleo comparte similitudes con otra producida entre el mismo empresario ruso y una empresa italiana vinculada al político italiano, Mateo Salvini que sirvió para financiar ilegalmente el partido ultraderechista ‘Liga Norte’.
El magistrado, basándose en un informe de la Guardia Civil, vincula a Josep Lluís Alay con la operación en la que participaron empresas rusas y chinas que, a su vez, contó presuntamente con la participación de Artem Lukoyanov, hijo adoptivo de Vlasilav Shurkov y exasesor del Presidente Ruso, Vladimir Putin.
La Audiencia señala «al entorno próximo a Puigdemont»
En este mismo informe la Audiencia mantiene que la decisión de mantener las diligencias abiertas es «necesaria, útil y pertinente a los fines de la investigación, siendo obligado indagar, al menos, sobre tal operación sospechosa por constituir posiblemente una pantalla de financiación ilegal, debiendo conocerse el destino del dinero obtenido con dicha venta y si llegó a España».
Considera además que no puede descartarse por el momento «la participación de personas del entorno próximo a Puigdemont» ya que, en una conversación intervenida a Alay, este mismo argumentó que «su trabajo en el tema energético ruso es estratégico».
Alay y Dmitrenko celebraron en otra conversación intervenida el «buen fin de la operación», que calificaron de «primer gran paso hecho». Además, se sospecha de un pago en concepto de «garantía» de 295.000 dólares cuya procedencia y destino final todavía se desconocen.
A Josep Lluís Alay también se le señala como el enlace entre Puigdemont y la inteligencia rusa para planificar las grandes protestas que tuvieron lugar en Cataluña en pleno desafío soberanista, según apuntó el periódico estadounidense The New York Times.