La ANC teme que el indulto soborne a ERC y al Govern
La entidad de Elizenda Paluzie llama a "reflexionar" sobre los liderazgos del procés e insinúa que los indultados deberían dar un paso atrás
La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, en un acto de la entidad independentista / ANC
La Assemblea Nacional Catalana ha mostrado preocupación por los indultos. Lejos de mostrar cualquier complicidad con el Gobierno, la entidad presidida por Elisenda Paluzie ha cargado contra la medida de gracia entre muestras de preocupación por si este gesto puede llegar a sobornar a Esquerra Republicana y al Govern.
«Los indultos no son ninguna solución política y nos preocupa que condicionen la actuación política del Parlament y del Gobierno», explica la entidad secesionista en un comunicado. La entidad defiende que «solo la independencia amnistiará a las más de 3.000 personas que sufren la represión del Estado«.
La ANC aprovecha para dar un toque a los partidos independentistas, al insistir en que dentro de «lucha democrática para la independencia» es «imprescindible» que el movimiento lo lideren perfiles «efectivos, libres y no condicionados por el chantaje del Estado español», en referencia a unos presos cuyo indulto se condiciona a la no-reincidencia.
«Reflexión colectiva sobre los liderazgos»
«Una vez los nueve presos y presas políticos estén en libertad, se tendrá que hacer una reflexión colectiva sobre los liderazgos del movimiento independentista», advierte la entidad de Paluzie. En el comunicado, recuerda que la medida de gracia se ha «otorgado bajo ciertas condiciones».
El documento, lleno de ataques a Pedro Sánchez, califica el juicio de «farsa» y ha criticado con dureza la naturaleza jurídica del propio indulto. «Hoy el Gobierno español les ha otorgado el perdón. ¿Perdonar el qué? ¿Perdonar unos delitos que nunca han existido?», lamenta el texto.
Una ANC más radical que nunca
Esta asociación independentista ha sido la más beligerante contra Pedro Sánchez y su plan de indultos. Convocó la manifestación frente al Liceu de repulsa a esta medida de gracia que ha dejado en libertad a los nueve condenados por sedición, conjuntamente con la CUP, con el objetivo de boicotear el acto.
La entidad que agrupa al independentismo más irredento también intentó sin mucho éxito organizar una quema de fotos del Rey, aprovechando su presencia en la inauguración de la reunión del Cercle d’Economia celebrada la semana pasada en el hotel W Barcelona.
