Indignación en los Mossos tras el rechazo de Junts, ERC, la CUP y VOX a condenar la violencia contra los agentes
El malestar también se siente en la Guardia Urbana, puesto que el sindicato CSIF lamenta la doble moral del partido de Ada Colau: aprobar un texto en el Parlament y hacer lo contrario en el Ayuntamiento
Nuevo episodio entre la deteriorada relación de Mossos d’Esquadra y la Generalitat. El rechazo de ERC, Junts, CUP y Vox a una propuesta de resolución presentada por el PSC, que cerraba filas con los cuerpos del orden frente a los disturbios callejeros y agresiones, y pedía a la Generalitat que les diera apoyo jurídico, ha provocado una fuerte indignación en el cuerpo policial.
El texto que ha realimentado discordia entre los Mossos y el Govern es la propuesta de resolución que presentó el PSC en el pleno del pasado jueves. El documento instaba a la Generalitat a dar «plena cobertura al cuerpo de Mossos d’Esquadra», con la «tramitación de todas las denuncias por actuaciones contra la autoridad».
Según han explicado fuentes policiales a Economía Digital, el principal motivo de enfado dentro del cuerpo ha sido el rechazo de los partidos que sustentan al Govern del punto 4 del redactado. La Generalitat, como consecuencia de su alianza con la CUP, ha renunciado a denunciar las agresiones a Mossos que no cuenten con lesiones visibles.
El vídeo donde la secretaria segunda de la mesa, Aurora Madaula (JxCat), leía el texto de la resolución del PSC y su posterior rechazo en la Cámara catalana se ha viralizado entre los agentes de policía, según las citadas fuentes. Un malestar que también comparten desde la Guàrdia Urbana y otros cuerpos de Policía Local.
Un Govern que asume «el discurso de odio» contra la policía
El sindicato USPAC ha denunciado la pasividad del conseller Joan Ignasi Elena. «Un Govern y un President que han asumido el discurso de odio contra el cuerpo de Mossos d’Esquadra y de Policías Locales: de los violentos se ha hecho víctimas, y de la policía a los culpables».
El portavoz sindical de USPAC, Albert Palacio, ha lamentado en Economía Digital la subordinación del conseller Joan Ignasi Elena a la CUP: «Parece que el presidente de la Generalitat sea Carles Riera». El policía ha asegurado que hay agentes que «quieren guerra» contra el departamento de Interior, y preparan acciones de protesta: «La gente está quemadísima».
El sindicato ha convocado una manifestación frente al Parlament de Cataluña para el próximo martes 5 de octubre. Palacio ha invitado al presidente de la Generalitat, a los consellers, y a la presidenta del Parlament, Laura Borràs a dejar el servicio de escolta que tienen 24h: «¿Si no quieren a la policía? ¿Si no quieren a los Mossos? ¿Para qué nos necesitan?».
«El menosprecio del 60% del Parlament»
Una indignación que comparten los compañeros de FEPOL. A través de un comunicado, lamentan que «la segunda institución mejor valorada de Cataluña no puede sufrir el menosprecio del 60% del Parlament, porque esto no refleja la realidad: la mayoría de nuestra sociedad valorará, y mucho, los trabajos de sus Policías, que no dejan de ser servidores públicos».
El sindicato policial recuerdan que los agentes «ejecutan aquello que les mandan con la mayor profesionalidad posible». «Desde FEPOL, después de la consulta con los sindicatos que la integran, estamos valorando la posibilidad de convocar una manifestaicón por el respeto a una institución tan importante como es la Seguridad Pública».
FEPOL considera que el Govern está «secuestrado» por una minoría parlamentaria: «Después de leer la propuesta de resolución nos resulta muy complicado entender como no fue posible negociar y hacer las transascciones necesarias para que la resolución saliera aprobada». El sindicato estudia movilizaciones de protesta.
La Guàrdia Urbana critica el doble rasero de Colau
La indignación del texto también ha llegado a la Guardia Urbana de Barcelona. El sindicato CSIF ha criticado a Catalunya en Comú Podem, el Partido de Ada Colau, por votar la resolución a favor, puesto que consideran que es contradictorio con las políticas y manifestaciones que lleva a cabo en el ayuntamiento.
«Desde CSIF, exigimos coherencia política al gobierno Municipal de la Ciudad de Barcelona (Barcelona en Comú y PSC). Coherencia política entre lo que vota en el Parlament y lo que hace y cómo gestiona la seguridad en la Ciudad de Barcelona», lamenta su portavoz, Eugenio Zambrano.
El sindicato lleva exigiendo desde 2015 que el consistorio «condene los hechos violentos cuando se produzcan» y que «apoye institucionalmente a la policía», así como «personarse como acusación particular en todos los casos donde son agredidos los policías». El sindicato recuerdan que han sufrido 406 agresiones desde enero de 2016.
CSIF también ha condenado que el Parlament rechace amparar a los agentes de policía. «No logramos entender cómo es posible que el Parlament se alinee junto a aquellos que pretenden quebrar la convivencia e ir contra la Policía, que es quien garantiza las libertades públicas y la seguridad que nos confiere la Constitución».
También, lanzan críticas contra el Joan Ignasi Elena, al lamentar que vaya «contra el propio cuerpo policial que dirige los Mossos d’Esquadra y contra las policías locales (entre ellas Guardia Urbana de Barcelona), que coordina conforme a lo establecido en el Estatut de Catalunya.