Pablo Iglesias prepara un ataque contra Marlaska por las devoluciones en caliente
Pablo Iglesias se comprometió a derogar la norma que el Gobierno podrá aplicar a partir de esta semana
El partido de Pablo Iglesias, Unidas Podemos, prepara una ofensiva contra el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ante la posibilidad de que aplique las llamadas ‘devoluciones en caliente’ o rechazos en frontera de los inmigrantes ilegales que intenten entrar en España.
El Tribunal Constitucional tiene previsto avalar en un pleno que comienza este martes esta norma regulada en la Ley de Seguridad Ciudadana, aprobada por el gobierno de Mariano Rajoy en 2015.
Los socialistas se opusieron a esta medida cuando el PP la defendía asegurando que «vulnera el derecho de los inmigrantes a una tutela judicial efectiva». Pero Interior contempla su aplicación con el aval del TC y podría suponer la devolución a Marruecos y Mauritania de los más de 4.000 inmigrantes llegados a Canarias en patera estas dos últimas semanas.
Una medida que, en caso de que Interior ponga en práctica, condicionará a Unidas Podemos como socio del Gobierno de coalición. Los morados están totalmente en contra y, según ha podido saber Economía Digital, ya preparan un ataque contra Marlaska si decide, finalmente, aplicar esta norma que, previsiblemente, será aprobada esta semana por el Constitucional.
El partido de Pablo Iglesias se comprometió en su programa electoral a derogar la conocida como ‘Ley mordaza’ de Rajoy para eliminar las llamadas ‘devoluciones en caliente’. «Tenemos aún que decidir qué es lo que vamos a hacer, pero no nos vamos a quedar callados», esgrimen desde la formación a ED.
Iglesias contra Marlaska
El asunto es de gran importancia para los morados, que recuerdan que ya han mantenido más de un choque en la anterior legislatura por su política migratoria y decisiones como las devoluciones en Ceuta y Melilla.
En la formación muestran su preocupación porque, además, no tienen competencias directas sobre este asunto dentro del Ejecutivo. Es decir, que todo depende de Marlaska.
Para Unidas Podemos, esta medida «no es coherente con un Gobierno progresista», aseguran, y podría llegar a convertirse en un nuevo foco de tensión entre los dos partidos que componen el Ejecutivo, así lo advierten.
El Consejo de Coordinación de Podemos en Canarias aseguró hace un par de semanas que las recientes visitas del ministro de Interior y de la comisaria europea Ylva Johansson a la isla fueron «hipócritas y decepcionantes».
«No nos valen visitas ni fotos ni promesas vacías. Tanto los migrantes como el pueblo canario se merecen el respeto del Estado y de la UE», aseguró la formación en un comunicado.
Podemos iza la bandera progresista
«Interior no se puede descolgar de la política progresista del Gobierno y debe ser coherente con medidas como el escudo social. No puede ser que despleguemos este escudo y haya más de mil personas en un muelle al sol en Canarias», insisten fuentes de Podemos.
Fuentes de Interior aseguran que si la ley se aprueba, «el Gobierno cumplirá siempre con la legalidad». En relación a que se aplicará la medida. No obstante, el Ejecutivo quiere esperar a conocer la redacción final de la sentencia al tratarse de un asunto muy delicado que ya enfrentó a PSOE y a Podemos.
La propuesta que siguen manteniendo los morados para solucionar el problema es la de poner en marcha vuelos desde Canarias a la península para que sean acogidos «digna y convenientemente», insisten, en lugar de las deportaciones. Piden, además, que se cumpla la sentencia del Tribunal Supremo que obliga a la libre deambulación de migrantes con peticiones de asilo en trámite.
La UE cuestiona a Podemos
Pero estos vuelos han sido frenados por Interior y la Unión Europea por la pandemia y por lo que llaman «efecto llamada».
El viernes y desde el Ministerio de Política Territorial se anunció un nuevo plan del Gobierno para aliviar las islas, después de que estos últimos días colapsaran los servicios de atención y ermegencias con la llegada masiva de pateras, que en el último año han aumentado en más de un 660%, superando las 15.500 entradas.
La vicepresidenta Carmen Calvo está al frente de este plan que aúna los esfuerzos de varios ministerios: Política Territorial, Inclusión, Interior, Fomento y Exteriores.
Se traduce en aumentar las dotaciones de Policía Nacional y Guardia Civil para frenar las llegadas; la creación de un Centro de Atención Temporal de Extranjeros (CATE) para realizar la filiación de los migrantes recién llegados y dotar la zona con instalaciones de Defensa para levantar tiendas donde poderlos alojar.
El papel del Ministerio de Exteriores también pasará por el impulso de las relaciones bilaterales con los países de origen y tránsito, por lo que la ministra de Exterioes, Arancha González Laya, viajará antes de final de año a Senegal, uno de los países clave en la ruta canaria, según informan desde el Gobierno.