Hermitage: el Puerto de Barcelona destapa los vaivenes de Colau
La presidenta del Puerto de Barcelona cuestiona que la alcaldesa rechace el Hermitage tras admitir en 2017 un uso cultural del espacio costero
El Ayuntamiento de Ada Colau ha cambiado radicalmente de opinión respecto a la construcción del Hermitage en el área contigua al Hotel W (o Vela), según la presidenta de Puerto de Barcelona. Mercè Conesa ha cuestionado este martes los informes del consistorio por los que ha rechazado la instalación del museo en la zona costera, a la vez que ha señalado que el propio gobierno municipal permitía el uso cultural de la ubicación hace tan solo dos años.
Conesa se ha remitido a la modificación del plan especial de la nueva bocana del puerto, aprobada por el propio consultorio en 2017-2018. «Admitía un uso cultural de aquella ubicación», subrayó la presidenta del Puerto. «Mi pregunta es cómo en 2017-2018 aquella ubicación era adecuada para un uso cultural y en 2020 ya no lo es», lamentó. Y advirtió de sus intenciones: «Vamos a documentarnos para ver qué ha pasado en este tiempo».
En una entrevista con Catalunya Ràdio, la también exalcaldesa de Sant Cugat del Vallès y expresidenta de la Diputación de Barcelona por CDC y Pdecat ha defendido que el uso de la nueva bocana del puerto para el Hermitage es compatible. «Lo que tenemos que hacer es intentar ponernos de acuerdo con el Ayuntamiento y me consta que se está trabajando con los equipos técnicos para la implantación de este equipamiento sea lo más adecuada posible».
Colau invirtió 42.700 euros en informes
Tampoco hay riesgo de inundaciones, según Conesa. Este fue uno de los motivos del Ayuntamiento para oponerse –con cuatro informes bajo el brazo (por valor de 42.700 euros) – a la construcción del museo en el puerto. La presidenta dice que el puerto «aguantó muy bien» el temporal Gloria y aseguró que «la infraestructura está preparada y además el sistema de previsión de oleaje» del que dispone la infraestructura hace que se pueda «actuar con mucha antelación».
A finales de enero el Ayuntamiento informó de su «no» al Hermitage en esa ubicación, ofreciendo cuatro ubicaciones alternativas con informes positivos. Los impulsores del proyecto se mostraron entonces «sorprendidos» porque el plan especial de la nueva bocana del puerto se aprobó en el pleno municipal con los votos a favor de los comunes de Colau, además de los de JxCat, Cs, ERC, PSC y PP, por lo que no se explicaban el reciente revés.
Hermitage Barcelona ha insistido en que solo le interesa levantar el museo en el puerto, descartando las ubicaciones alternativas que propuso el Ayuntamiento. Uno de los informes que presentó el consistorio se opone a ubicar el museo allí por el riesgo de inundaciones, pues se vaticina una crecida del nivel del mar de un metro en este siglo. Tampoco agrada a Colau que «este proyecto privado se haga en este espacio público».
Ante el temor acuciado por el gobierno municipal de que el proyecto acabe pidiendo «rescate público» si no funciona, Conesa ha afirmado que «en ningún momento se ha dicho que el Ayuntamiento tenga que rescatar nada, no sería en ningún caso la situación».