Hacienda castigará a la banca y las empresas
La ministra de Hacienda, MarĂa JesĂşs Montero, anuncia que en enero el tipo mĂnimo del impuesto de sociedades será del 15%
El gobierno de Pedro Sánchez revela su programa en materia de impuestos. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha anunciado este jueves que en enero entrará en vigor un tipo mínimo del 15% del impuesto de Sociedades. En la actualidad el tipo medio es del 12% por la aplicación de bonificaciones fiscales a las empresas.
Además, la responsable de las políticas fiscales del Ejecutivo ha adelantado que su departamento perfila nuevos impuestos para la banca y las empresas tecnológicas, además de tributos medioambientales, según ha apuntado en una entrevista en la Cadena Ser. El Gobierno también establecerá impuestos medioambientales para desincentivar prácticas contaminantes, como la equiparación de los impuestos especiales del gasóleo y de la gasolina.
Una de las medidas anunciadas por Montero es la llamada tasa Google, un impuesto que afectará a empresas tecnológicas como Amazon, Google o Facebook y que ya estudió implantar el gobierno de Mariano Rajoy. El otro gran tributo que implantará el Gobierno es un impuesto a la banca con carácter finalista para pagar las pensiones. Montero ha reconocido que el tributo no gustará al sector bancario pero ha indicado que confía en que junto con la subida de los salarios y la mejora del empleo permitirá garantizar las pensiones.
Pedro Sánchez negociará los aumentos de impuestos con Podemos
Con los nuevos impuestos, además de mejorar la financiación de las pensiones, el Ejecutivo prevé elevar el techo de gasto en los Presupuestos Generales del Estado de 2019, que el PSOE tiene pendiente negociar en busca de apoyos de otras fuerzas parlamentarias. Para ambos objetivos, la ministra ha mencionado a Podemos como socio preferente en la negociación. Los cálculos de los socialistas en la oposición eran que el impuesto a la banca aportaría 1.000 millones de euros de recaudación anual, mientras que la tasa Google aportaría 1.500 millones, sociedades aportaría 4.000 millones y los impuestos medioambientales, 600 millones.
En cualquier caso, queda fuera de los planes del Ejecutivo cualquier subida del IRPF, el impuesto que afecta principalmente a los asalariados. «No queremos subir los impuestos a los ciudadanos», ha argumentado la ministra de Hacienda, que ha hablado de construir «una nueva fiscalidad del siglo XXI».