Hachazo fiscal a los bancos para recaudar 3.000 millones en dos años
Sánchez también ha anunciado un impuesto sobre los beneficios extraordinarios de las grandes empresas energéticas que recaudará 2.000 millones de euros al año
Hachazo fiscal a los bancos. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha marcado un hito en su legislatura con este anuncio durante su primera intervención en el Debate del Estado de la Nación que se celebra esta semana. Sánchez, según ha expuesto, pretende recaudar hasta 3.000 millones entre 2023 y 2024 a costa de la banca. «Se trata de un impuesto excepcional a las grande entidades financieras y tendrá una duración de dos años», ha apuntado.
Su motivación es clara: que los costes de la inflación no recaigan en los trabajadores, sino en las grandes corporaciones. «Los sobrebeneficios no caen del cielo, sino del bolsillo de los que pagan», ha apostillado el socialista.
Pero no sólo afecta a las finanzas. Tampoco se librará el sector energético. El jefe del Ejecutivo ha comunicado que va a poner en marcha un impuesto sobre los beneficios extraordinarios de las grandes empresas energéticas que recaudará 2.000 millones de euros al año durante los próximos dos años. «Afectará a los beneficios de 2022 y 2023 a los grupos dominantes del sector gasista y petrolero», ha explicado.
Junto a los impuestos a la banca y al sector energético, también ha anunciado que el Gobierno bonificará el 100% de los abonos de viajes de todos los servicios de Cercanías, Rodalies y media distancia operados por Renfe. «Vamos a pasar del 50% al 100%. Serán gratuitos del 1 de septiembre al 31 de diciembre», ha afirmado.
Además, ha comunicado la prórroga de la bonificación del gas; la creación del Centro Estatal de Salud Pública para mejorar la gestión de las emergencias sanitarias, la construcción de dos gigafactorías de baterías y la implementación de estudios de programación, robótica y pensamiento computacional en etapa escolar.
Sánchez reclama el compromiso social de las empresas
«Es el momento de comprobar el compromiso social de las empresas. Ahora la mayoría social necesita su compromiso», ha aseverado Sánchez en su discurso. El líder de los socialistas ha marcado diferencias en este sentido con los de Alberto Nuñez. «La anterior crisis del PP fue débil con los fuertes y fuerte con los débiles, no vamos a ser así», ha sentenciado
«Tenemos que poner la economía y el Estado al servicio de la mayoría social. No es sólo cuestión de justicia social, es que la política que se realiza en base a la justicia social es la más rápida, además de más justa», ha concluido Sánchez.
Podemos celebra las medidas de Sánchez
Sánchez, como ya se había anticipado en los últimos días, ha centrado su discurso en la defensa de la clase media trabajadora. «Me voy a dejar la piel», ha apuntado al inicio de su intervención. No obstante, han tenido que pasar cuarenta minutos de discurso para que el presidente anunciara su batería de medidas económicas de las que no había informado hasta este lunes a Unidas Podemos, pero que han sido bien recibidas por sus socios.
«Como pedimos desde hace semanas, hoy se empieza a concretar el cambio de rumbo del Gobierno: recuperar el ritmo de avances sociales y acabar con los privilegios de las grandes empresas para estar a la altura de la gente. Gobernar juntas para profundizar la democracia», ha señalado en Twitter la líder de los morados, Ione Belarra.
En declaraciones a los periodistas, Belarra ha apuntado que su partido «ha trabajado mucho» para convencer al PSOE del «cambio de rumbo» y que la coalición es «patrimonio de la gente». Al finalizar el discurso de Sánchez, todos los ministros se han puesto en pie para alabar al presidente, incluso Yolanda Díaz, que hasta ese momento no había aplaudido ninguna de las medidas que había ido anunciado el presidente. Sin embargo, al salir del hemiciclo la vicepresidenta segunda ha indicado frente a los medios que esperaba que estos impuestos se extendieran a todo el Ibex-35.
Al PP no le basta
La primera valoración por parte de la oposición la ha hecho la secretaria general del PP y portavoz en el Congreso, Cuca Gamarra, que ha considerado «insultante» la actitud de Sánchez. «Ante los dos grandes problemas de España [el IPC y la energía] las propuestas son ninguna. Pide esfuerzo pero él no está dispuesto a hacer ninguno«.
A sus ojos, el presidente del Gobierno está siguiendo «la misma estrategia que en la pandemia», descargar en las comunidades autónomas y «ahora en los españoles». «Brilla por su ausencia la autocrítica, algo propio del que gobierna desde la soberbia».
El PP cree que los españoles «esperaban a un presidente con reformas y soluciones, y de eso nada». «Es un discurso en el que no se tiene una buena percepción de la realidad, no se está dispuesto a asumir la responsabilidad y plantear reformas serias».
También estaba presidente de los populares, Alberto Núñez Feijóo, presente en la bancada. En su salida del Hemiciclo, Economía Digital le ha preguntado por su parecer y tan sólo ha respondido que prefiere «ser prudente, y dejar el protagonismo a nuestra portavoz».