Guerra en el PP de Barcelona: el concejal Óscar Ramírez lanza a sus distritos contra Josep Bou
Seis de los siete presidentes de distrito del partido en la Ciudad Condal que firmaron la carta contra Bou fueron nombrados como gestora directamente por el edil crítico
El PP de Barcelona vive una de sus épocas más convulsas. Los concejales del Ayuntamiento hace tiempo que mantienen una guerra interna, que ha estado a punto de hacer estallar por los aires el grupo municipal. El concejal Óscar Ramírez, que amagó con romper el equipo que forma con el portavoz Josep Bou, ha contado con el respaldo de siete presidentes de distrito, seis de los cuales nombrados directamente por él al imponer gestoras.
Óscar Ramírez, actual presidente provincial del PP de Barcelona, nombró sin democracia interna en julio de 2019 seis juntas gestoras que se han perpetuado hasta la actualidad en varios distritos de la Ciudad Condal. Además, nombró al presidente del distrito de Gracia, Miguel Raposo, –el único votado que firmó contra Bou– como Coordinador de Distritos, un cargo que históricamente se hacía con el consenso de todos los líderes de la capital catalana.
Son estas siete personas aupadas por Óscar Ramírez las que firman el documento público donde piden la dimisión de Bou y que entregue el acta de concejal. Según han explicado fuentes implicadas del PP en Barcelona, las gestoras tienen una vigencia de seis meses, prorrogables si la situación se justifica, aunque no se ha hecho ni una cosa ni la otra. «Es más fácil poner gente a dedo. ¿Cómo se justifica una medida de emergencia [las gestoras] en seis distritos a la vez?».
Las gestoras, al mismo nivel que los distritos votados
«Se está poniendo a las juntas gestoras al mismo nivel de los que han sido escogidos por los afiliados. Se les está dando el mismo tiempo, y se renovarán a la vez que los que han sido votados», lamentan fuentes municipales del partido. Lo cierto es que hasta 2019, los diez distritos habían sido nombrados por sus afiliados. Fue tras las municipales cuando las cosas empezaron a torcerse, y en verano Ramírez fulminó a seis de diez e impuso a las gestoras.
El momento en el que las gestoras sean relevadas cargos escogidos democráticamente es todo un misterio, aunque desde el partido explican que no será antes del congreso provincial que renueve el órgano que ahora preside Ramírez. De momento, estas gestoras seguirán en una provisionalidad que camina hacia los dos años, y que, en el caso de la carta conjunta, generan confusión al parecer que representan a las bases de sus territorios.
Otras prácticas dentro del PP han cambiado con los años. Las fuentes locales del partido han explicado que en el partido la «norma no-escrita» de que los consellers de distrito, los cargos electos que representan a los ciudadanos en cada uno de los consejos de distrito de Barcelona, los tenía que escoger la junta de distrito de la formación.
Una situación que, por ejemplo, no se dio en Les Corts con el cesado Xavi Cañigueral. El joven popular, tras ser nombrado como líder de distrito por Ramírez, recibió también el cargo institucional pese a que la junta anterior a la gestora había decidido que fuera otra persona quien ocupara la responsabilidad.
Una polémica muy larga
Las tensiones en el PP de Barcelona explotaron con la decisión de Josep Bou de cesar a los consellers municipales de Les Corts y Sarrià-Sant Gervasi, Xavi Cañigueral e Isaac Martín. Además, el líder del PP en el Ayuntamiento cesó al jefe de Gabinete de Alejandro Fernández, que el partido ha recolocado en el Parlament de Cataluña como único asesor del Grupo Mixto, ocupando las dos plazas disponibles.
Los siete jefes de distrito enfrentados con Bou exigieron en una carta la dimisión del portavoz municipal, tras lamentar las decisiones que había tomado y asegurar que no era «militante del partido». Además, le echaron en cara al concejal que se ofreciera a liderar la lista de Vox o Ciudadanos en una entrevista a Betevé. Los firmantes recordaron que el edil había sido condenado por agresión a un ciudadano de Barcelona, lo que va «en contra del Partido Popular».
“A estas desafortunadas decisiones, tenemos que sumarle las constantes declaraciones en los medios de comunicación que realiza el señor Bou sobre diferentes personas que conformamos el Partido Popular, anunciando ceses, opinando sobre las capacidades y méritos según criterios del señor Bou”, recogía el texto. Uno de los firmantes, el jefe del PP en Ciutat Vella, José Antonio Coto, le afeó al portavoz municipal que llevara al partido «al peor resultado de su historia».