Guanyem propone la recogida de basuras puerta por puerta como nuevo modelo para BCN
La plataforma de Ada Colau considera que el actual sistema ha sido un "rotundo fracaso". Plantea que la administraciĂłn supervise la separaciĂłn de basuras de cada vecino, el modelo de Bildu en el PaĂs Vasco
Guanyem, la plataforma política liderada por Ada Colau y que se perfila como la gran revelación en las próximas elecciones municipales de Barcelona, plantea un nuevo modelo de gestión radicalmente diferente al aplicado hasta ahora. El partido emergente, que espera generar un terremoto en la política municipal barcelonesa, propone la supresión de contenedores en la calle y la creación de un sistema que empuje a los vecinos a reciclar y a separar bien sus residuos.
El sistema, que incluye la recogida de basura puerta por puerta similar al aplicado por Bildu en el País Vasco, será aplicado en el caso de que Guanyem obtenga la mayoría suficiente para gobernar Barcelona, han explicado a este diario los portavoces de Guanyem. El partido ve necesario evaluar de forma urgente un nuevo modelo de gestión que mejore los pobres resultados de recogida actuales que, según aseguran, no se corresponde con el enorme gasto en gestión de basuras.
Puestos de trabajo
Los responsables del programa medioambiental del nuevo partido aseguran que el actual sistema de gestión de residuos ha sido un «fracaso rotundo» y urgen a un cambio de modelo en profundidad. La recogida puerta por puerta también se aplica en 100 municipios en Catalunya, según explican los portavoces de la plataforma, y será capaz de crear una gran cantidad de puestos de trabajo, además de mejorar los índices de reciclaje, según su percepción, aunque no se aplicará en toda la ciudad.
«El sistema de recogida puerta por puerta no se podrá aplicar en toda la ciudad pero sí puede ser completamente factible en barrios como Gràcia, Sants o en el distrito de Ciutat Vella», explica uno de los portavoces del movimiento. «En otros barrios, por ejemplo, como Ciutat Meridiana sería necesario otro modelo pero la idea es intentar individualizar la gestión de los residuos para hacer más responsables a los vecinos de lo que generan y garantizar mayores índices de eficiencia y reciclaje», añade.
Polémica en el País Vasco
La plataforma evaluará un nuevo esquema en los próximos dos años en el caso de ganar las elecciones. El sistema puerta a puerta es el mismo que ha encendido la polémica en los últimos años en los municipios del País Vasco gobernados por Bildu. La rebelión vecinal, principalmente en las localidades guipozcoanas, ha obligado a algunos ayuntamientos a suavizar la medida que exige a cada vecino una precisa separación de todos sus residuos que son dejados en unos postes instalados frente a cada portal. La aplicación inicial tuvo tanto impacto que algunos vecinos terminaron dejando sus basuras frente a las casas de los alcaldes y también reunieron firmas para protestar contra la medida.
Pero los portavoces de Guanyem aseguran que no pretenden «controlar» la basura de los ciudadanos sino concienciarlos en que el actual sistema es insostenible. Quieren transformar un modelo con índices de reciclaje –aseguran– sumamente bajos. Barcelona genera 650.000 toneladas de residuos al año pero apenas se recogen selectivamente unas 200.000 toneladas. Además, un 20% de los residuos que van a parar al contenedor amarillo están mal seleccionados, por lo que deben ser desviados a otros contenedores, según los datos manejados por el partido.
Los envasadores desmienten las cifras y aseguran que el reciclaje de envases en España (los residuos del contenedor amarillo) superan más del 70%. La gestión del actual sistema de recogida, el modelo Ecoembes promovido por la asociación de los fabricantes, es controlado por los propios fabricantes que han generado suspicacias entre los detractores del modelo. «Se puede sospechar muy fácilmente que no declaran el número real de envases producidos para inflar las cifras de reciclaje», explican los integrantes de Guanyem.
El retorno de envases
Con el actual sistema, los fabricantes pagan sólo la recogida del envase amarillo, pero no el resto. Alemania ha comenzado a incluir en el contenedor amarillo otro tipo de desechos reciclables para aumentar la efectividad del sistema.
La plataforma de Ada Colau también propondrá desplegar en Catalunya un sistema de pago por depósito, el llamado modelo Retorna aplicado en Alemania. El esquema obliga a los consumidores a pagar un depósito de entre 10 y 25 céntimos que sólo es devuelto en las tiendas si se retorna el envase.