El Govern reivindica la mesa de diálogo en la previa a la manifestación independentista
El Govern pide que la Diada sea una jornada que sirva para "ganar fuerzas" ante la mesa de diálogo de la semana próxima, pese a la división interna en el Govern
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonés (c), acompañado del vicepresidente, Jordi Puignerò (i), y la consellera de la Presidencia, Laura Vilagrà (d), encabeza la ofrenda floral del Govern al monumento de Rafael Casanova en Barcelona, en el inicio de las celebraciones con motivo de la Diada del 11 de septiembre. EFE/Quique García
La Generalitat de Cataluña ha aprovechado su asistencia a la tradicional ofrenda a Rafael Casanova en la Diada para reivindicar la mesa de diálogo, que se reunirá a finales de la semana próxima todavía sin la presencia confirmada de Pedro Sánchez, una demanda que el Govern considera imprescindible.
La consellera de Presidència, Laura Vilagrà, ha asegurado que el Govern tiene «un compromiso firmo con los derechos fundamentales» e insisten en que se sentarán en la mesa para defender «la amnistía y la autodeterminación». La número tres de la Generalitat ha asegurado que la Diada sirve para «ganar fuerzas» para afrontar la mesa.
Una línea similar ha trasladado la portavoz de ERC, Marta Vilalta. La dirigente republicana ha asegurado que su partido quiere trasladar en la reunión con el Gobierno español «la fortaleza del movimiento independentista» y que su único objetivo final es «hacer posible la república catalana».
Sànchez insiste en no dar ‘ni un paso atrás’
Vilalta también ha insistido en supuesto consenso «del 80%», al asegurar que un referéndum sobre la independencia de Cataluña es algo que trasciende más allá del independentismo. Los republicanos aprovechan así para defender este órgano, cuestionado por sus socios de Junts y también por la CUP.
Quien también ha confirmado su asistencia a la mesa es Junts per Catalunya. El secretario general de la formación, Jordi Sànchez, ha asegurado que asistirán para dar cumplimiento al pacto de investidura con los republicanos, aunque han vuelto a mostrar sus suspicacias ante un gobierno español que «incumple sus acuerdos», y ha ejemplificado con los 1.700M€ de El Prat.
Además, Jordi Sànchez ha pedido que no se haga ningún tipo de cesión con las demandas de un referéndum de independencia y una amnistía para los «represaliados»: «Lo que nos jugamos en los próximos años es mucho más que unas competencias o un gobierno autonómico».
Salvador Illa: «Apoyaré que se vote un acuerdo, no una ruptura»
Una posición que al otro lado de la futura mesa no comparte. Salvador Illa, que ha encabezado la delegación del PSC que ha participado en la ofrenda floral a Rafael Casanova ha vuelto a cerrar la puerta a las demandas maximalistas del independentismo, al asegurar que «apoyarán que se vote un acuerdo, pero nunca una ruptura».
Los socialistas catalanes han vuelto a reivindicar la Diada como un día de todos los catalanes, y la senyera como bandera que representa la unidad de todos los catalanes. Además, ha pedido que todos estén «a la altura de aprovechar los cambios muy profundos», tanto en Cataluña como en el resto de España.
El acto institucional ha transcurrido sin mayores incidentes. Tras la ofrenda oficial del Govern, lo ha hecho la mesa del Parlament. Los partidos independentistas se han intercalado con federaciones y entidades deportivas y sociales representativas de la sociedad civil. Ni PP, ni Cs, ni Vox han asistido al encuentro.
