El Gobierno se desentiende de las sanciones a los ‘ongi etorri’ en plena negociación de los Presupuestos
El Ejecutivo aplaza las sanciones por los homenajes de los presos de ETA hasta que la Unión Europea se pronuncie sobre su impacto en la libertad de expresión
El Gobierno de Pedro Sánchez ha dejado en suspenso la aplicación de nuevas sanciones contra las personas que participen en los ‘ongi etorri’. La puesta en marcha de una reforma legal para penalizar los homenajes a los presos de ETA no se llevará a cabo hasta que la Unión Europea se posicione sobre su posible colisión con el derecho a la libre expresión.
El Ministerio del Interior ya anunció en el mes de febrero que llevaría a cabo una modificación de la Ley de Víctimas del 2011 para establecer un régimen sancionador que permita acabar con las celebraciones que reciben los asesinos a la salida de prisión. Sin embargo, ahora ha supeditado cualquier decisión al debate europeo que está en marcha, según ha publicado Europa Press.
El Gobierno ha explicado en una respuesta parlamentaria que esperará a que finalice el debate de la directiva europea sobre la lucha contra el terrorismo para adoptar medidas contra los ‘ongi etorri’, ya que se están analizando algunos aspectos como el encaje del delito de provocación pública para la comisión de atentados, cuando no haya un riesgo real e inminente.
«En el informe final de la Comisión Europea se abordarán las conductas de enaltecimiento del terrorismo, lo que podría determinar una modificación de la directiva europea en esta materia y sería necesario acomodar cualquier modificación de la legislación nacional», han explicado en su respuesta.
La Ley de Víctimas ya incluye en su artículo 61 un apéndice para advertir que se evitará cualquier acto de «exaltación del terrorismo, homenaje o concesión pública de distinciones a los terroristas» para evitar una humillación de los afectados y de sus familiares. Sin embargo, las dificultades para hacer efectivas las sanciones por la vía penal, han llevado al Gobierno a buscar alternativas por el camino administrativo como la imposición de sanciones económicas.
Los ‘ongi etorri’ se cuelan en la negociación presupuestaria
La decisión del Gobierno de aplazar las nuevas sanciones de los ‘ongi etorri’ se producen en un momento clave de alianzas parlamentarias. El Ejecutivo necesita los apoyos de algunos de sus socios por excelencia (Esquerra Republicana, Partido Nacionalista Vasco, EH Bildu, Más País o Compromís) si quiere sacar adelante el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado, después de que la derecha haya anunciado que votará en contra.
Las relaciones con la formación de Arnaldo Otegi se acercaron tras la decisión del líder abertzale de reconocer el dolor causado por ETA en el décimo aniversario del fin de la banda armada. Sin embargo, asociaciones de víctimas y formaciones políticas (del Gobierno y de la oposición) le han exigido más gestos. Uno de ellos es fomentar el fin de los ‘ongi etorri’.
Otegi se comprometió en una entrevista en Radio Euskadi a remar en esta dirección, aunque advirtió que el proceso no sería inmediato. Mientras tanto, no habrá nuevas sanciones. Al menos, hasta que se pronuncie la Comisión Europea.