Frank Serpa usó la ley de protección de datos para perpetrar su engaño
El MD Anderson Cáncer supo que el falso paciente de cáncer había falsificado sus informes para pedir dinero, pero no lo denunció por temor a esta normativa. Ahora, formará parte de la acusación
Frank Serpa, el falso enfermo de cáncer que está siendo investigado por estafa al alegar un cáncer terminal para recaudar dinero en Madrid, se aprovechó de la ley de protección de datos para difundir un informe médico falso sin que nadie lo delatase.
La clínica que lo atendió supo que había falsificado informes desde un primer momento pero no lo delató por temor a las sanciones de la ley de datos. Ahora, el centro privado formará parte de la acusación en su contra.
El inmigrante venezolano, que cursa una solicitud de asilo en España, inventó un falso cáncer para tratarse de un supuesto tumor agresivo y extraño en Houston. Para ello, apeló a la generosidad de los venezolanos en Madrid a quienes pidió 32.000 euros para su diagnóstico y tratamiento.
Serpa acudió al MD Anderson Cáncer Center en Madrid el 3 de febrero de 2016 para tratar su supuesta metástasis. En su primera visita, obtuvo un informe médico que utilizó para falsificar un diagnóstico que mostraba a todas las entidades y periodistas a los que pedía ayuda para difundir su caso, ahora conocido como «el nuevo caso Nadia».
El informe «corta y pega»
Los extractos del informe exploratorio verdadero fueron usados para construir un supuesto diagnóstico en el que mezclaba textos en español e inglés claramente diferenciados por el tipo de letra. Los párrafos agregados por Serpa en inglés simplemente explicaban las fases de los tipos de cáncer, pero todas las entidades que ayudaron a Serpa creyeron lo que el falso enfermo decía del informe y no en la literalidad del mismo.
La doctora que atendió al paciente, María del Pilar López Criado, se percató desde un primer momento que Frank Serpa gozaba de un estado de salud excepcional para tratarse de un paciente con cáncer terminal, tal como declaró la doctora a la policía el pasado 28 de diciembre.
¿Qué ley prevalece?
La clínica MD Anderson Cáncer Center de Madrid sabía desde abril que Serpa había falsificado un informe médico de la doctora, según consta en las declaraciones policiales a las que ha tenido acceso este diario.
La oenegé Manos Amarillas acudió a la clínica en abril para averiguar si el informe era real o no. Pero ni la doctora ni la clínica quisieron informar a la oenegé que se trataba de un informe falso por miedo a las sanciones que podrían tener por la ley de protección de datos.
La clínica aseguró que la ley de protección de datos le impedía dar cualquier tipo de información del paciente. De esta forma, el centro médico priorizó la ley de protección de datos a otras consideraciones legales que obligan a denunciar un delito cuando se tiene conocimiento de él.
En el interrogatorio a la doctora, la policía le preguntó por qué no denunció el caso de estafa cuando supo que había un informe falsificado. La doctora aseguró que desconocía quién había sido el autor del informe falsificado y con qué fin lo había hecho. Por esta razón, no consideró la denuncia como una opción.
Participación activa
Pero a partir de ahora, la clínica formará parte activa de la acusación. La policía ha pedido al centro médico que se presente como acusación en el caso. El MD Anderson Cáncer Center ha aceptado esta petición, conocida como «ofrecimiento de acciones».
La clínica ha confirmado que «ha iniciado las acciones legales pertinentes en orden a determinar la falsedad de estos documentos, ya que no han sido realizados por el centro ni por ningún doctor de la institución».
La abogada de Frank Serpa, que fue detenido por la policía y puesto en libertad condicional la semana pasada, ha asegurado que su cliente está dispuesto a colaborar con las investigaciones, aunque no ha aclarado si piensa devolver el dinero.