El fiscal pide hasta ocho años por apedrear el coche de Montoro
La Audiencia de Barcelona juzgará la próxima semana a seis jóvenes acusados de apedrear los vehículos de Cristóbal Montoro y Alicia Sánchez-Camacho
La Audiencia de Barcelona juzgará la próxima semana a seis jóvenes acusados de apedrear los vehículos que transportaban a los dirigentes populares Cristóbal Montoro, Alicia Sánchez-Camacho y Santiago Fisas. Los hechos sucedieron durante la campaña de las elecciones europeas de 2014 en Vilanova i la Geltrú (Barcelona). La fiscalía pide para ellos penas de entre cuatro y ochos años de cárcel por desórdenes públicos con el agravante de “discriminación ideológica”.
El juicio se desarrollará en cinco sesiones, de lunes a viernes de la próxima semana. Las defensas de los acusados consideran excesivas las peticiones de la Fiscalía porque los daños tan sólo se elevan a 700 euros. Este es el importe de los daños ocasionados en los dos vehículos por patadas y lanzamiento de piedras.
Con motivo de la campaña de las elecciones europeas de 2014, Montoro y Sánchez-Camacho arroparon a Fisas, candidato en aquellos comicios, en un mitin electoral en Vilanova i la Geltrú. Al finalizar, un grupo de unos cincuenta jóvenes impidieron la salida de los vehículos de los dirigentes populares durante unos minutos. Según el escrito de la Fiscalía, les insultaron y les tiraron objetos como botellas y piedras. La seguridad de la comitiva corría a cargo de los Mossos d’Esquadra y de la Policía local.
El fiscal aplica el agravante de “discriminación ideológica” por apedrear al coche de Montoro
Los Mossos identificaron a diez personas por aquellos incidentes. De estos, un menor de edad ya ha cumplido la pena impuesta de 120 horas de trabajos sociales y para otros tres la Fiscalía solicita el sobreseimiento provisional de la causa.
Los presuntos delitos que les imputan son desórdenes públicos, con el agravante de discriminación ideológica, daños y atentado contra un agente de la autoridad. Uno de los acusados agredió supuestamente a un mosso. Para cinco de ellos, el fiscal solicita una pena de cuatro años y, para uno, de ocho. Además les reclaman multas de entre 200 y 1.000 euros.