Feijóo promete a los empresarios catalanes eliminar el Impuesto de Patrimonio

El PP, liderado por Alberto Núñez Feijóo, va desgranando poco a poco su hoja de ruta económica para cuando llegue a la presidencia del Gobierno, si así lo deciden los ciudadanos en las próximas elecciones generales. La última pincelada la ha dado en Barcelona, en una reunión privada con empresarios y primeros ejecutivos convocados en la patronal catalana, Foment del Treball, donde se ha comprometido a eliminar el Impuesto de Patrimonio a nivel estatal cuando llegue a La Moncloa, según relatan varias fuentes presentes en el cónclave a Economía Digital.

La supresión a nivel estatal del Impuesto de Patrimonio implicaría un alivio fiscal de 1.150 millones de euros en todo el territorio nacional, según datos de 2019, y los mayores beneficiarios residirían, precisamente, en Cataluña, donde se recauda prácticamente el 48% de esta cantidad, 554 millones de euros en ese ejercicio. La catalana es sin duda la base imponible más perjudicada por este tributo, cedido a las autonomías desde 2011, cuando el entonces presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, decidió recuperarlo para hacer frente fiscalmente a la anterior crisis económica.

La promesa de Feijóo con Patrimonio

Feijóo, que acudió a la reunión de la patronal catalana que preside Josep Sánchez-Llibre junto al consejero de Hacienda andaluz y su mano derecha en Génova para temas económicos, Juan Bravo, afirmó que la fiscalidad que va llevar a cabo el PP en el Gobierno es la misma que está aplicando el PP en Madrid, Andalucía y Galicia: impuestos bajos. La receptividad del empresariado catalán, en contraste con citas anteriores con Pablo Casado, fue total.

El Impuesto de Patrimonio es una figura de titularidad estatal cuya gestión y normativa está cedida a las comunidades autónomas. Éstas no pueden, por tanto, eliminarlo en el territorio, pero sí pueden bonificarlo hasta el 100%, como es el caso de Madrid, con Isabel Díaz Ayuso, y como lo será en Andalucía, después de la promesa de su presidente, Juanma Moreno. El PP, cuando estaba liderado por Pablo Casado, ya decidió impugnar ante la Justicia el Impuesto de Patrimonio, por su carácter permanente.

Feijóo, lejos de enmendar la política de su antecesor, va un paso más adelante y promete su supresión a nivel estatal. Esto significaría no solo fortalecer la política autonómica de impuestos bajos del PP, sino evitar que las comunidades donde no gobiernan los populares, como es el caso de Cataluña, puedan exprimir una figura que siempre debió ser temporal, según las intenciones de Zapatero por aquel entonces y que Mariano Rajoy nunca revisó. Actualmente

Fiscalidad y déficit

Las fuentes presentes en el evento con Núñez Feijóo en Foment destacan que basó su intervención, principalmente económica, en dos ejes: reducir la fiscalidad y reducir el déficit público. Sobre fiscalidad, el modelo es el que han seguido las CCAA populares y que incluyen también una reducción en Sucesiones y Donaciones. Patrimonio es un impuesto vigente en España y desfasado en un contexto europeo. En el caso de SyD, el consenso es menor, pero también se comprometió a estudiar rebajas paulatinas sobre esta figura.

Además de la fiscalidad, Feijóo hizo mucho hincapié en que una de sus principales preocupaciones cuando se erija como presidente del Gobierno será la reducción del déficit público. Al igual que en la crisis y cambio de ciclo de 2011, los desfases presupuestarios amenazan de nuevo con ser un nuevo un problema para el margen fiscal del Gobierno y la economía española. Tanto Feijóo como Juan Bravo se comprometieron a actuar contundentemente en este sentido.