España descarta seguir todas las restricciones de Francia y Alemania
Fernando Simón defiende que nuestro país lleva más tiempo aplicando medidas que han permitido una expansión "más controlada" del virus
El Ministerio de Sanidad se resiste a aplicar medidas que ya han adoptado otros países de Europa, como Francia o Alemania, ante el aumento de casos de coronavirus.
El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha pedido «templanza» y ha explicado que la evolución de la pandemia en España es mucho más estable.
El experto del Gobierno ha defendido que nuestro país lleva más tiempo aplicando restricciones, pese a ser el primer país de Europa junto con Francia en llegar al millón de contagios, y que eso ha permitido que los contagios se expandan «de forma más controlada».
«La solución no es aplicar cada vez más medidas, sino que se apliquen de verdad, que sean reales», ha declarado el epidemiólogo. La mano derecha de Salvador Illa ha añadido que el efecto de prohibir la movilidad nocturna no se conocerá hasta dentro de cuatro o cinco días.
Simón ha rechazado el cierre de establecimientos y de eventos culturales, porque no se debe «culpabilizar a un sector que está haciendo las cosas bien, muy bien». El experto español se desmarca así de las medidas que han probado Macron y Merkel contra el virus, y que autonomías como Cataluña también han aplicado.
Francia y Alemania: sus respectivos confinamientos
Francia ha impuesto una médida muy drástica: un confinamiento domiciliario de un mes, aunque distinto al del mes de marzo: los colegios estarán abiertos, las jornadas de trabajo continuarán en función de lo posible –pese a que se prioriza el teletrabajo– y las residencias para la tercera edad seguirán recibiendo visitas.
Macron reconoció a través de su discurso televisado que «ni las previsiones más pesimistas habían anticipado que el virus circulara con esta rapidez» y advirtió de que esta segunda ola «será más dura y mortífera que la primera». Los bares y restaurantes seguirán cerrados, aunque se estudiarán reaperturas de algunos comercios en 15 días a tenor de la reinfección.
Alemania ha eludido el confinamiento, aunque ha limitado mucho las posibilidades para el contacto social. La canciller Angela Merkel, conjuntamente con las regiones (länders), han acordado el cierre de bares y restaurantes, así como del ocio, la oferta cultural y el deporte aficionado en espacios cerrados, aunque se mantendrá el comercio y la actividad escolar.
Las medidas del país germano, basadas en el cierre perimetral y las restricciones de sectores no-esenciales, se empezarán a aplicar a partir del 2 de noviembre: «Necesitamos actuar ahora». La canciller ha pedido «un esfuerzo nacional» que durará hasta final de mes para «verificar si las medidas siguen siendo necesarias y decidir en consecuencia».