España deja de recibir gas a través del gasoducto que cruza Marruecos
Los registros de Enagás reflejan que el caudal de gas en el puerto de Tarifa ya está a cero, después de que haya expirado el contrato que unía a Argelia y Marruecos
El cierre del gasoducto del Magreb ya es una realidad. España ya no recibe actualmente ningún suministro de gas a través de sus instalaciones de Tarifa. La decisión de los gobiernos de Argelia y Marruecos de romper todas sus relaciones diplomáticas se ha saldado finalmente este lunes con el bloqueo del conducto que cruza ambos países hasta llegar al sur de la Península ibérica.
Los datos diarios que ofrece Enagás sobre el flujo de caudales instantáneos ya muestran que la cifra se ha quedado a cero desde primera hora de la mañana, después de que el 31 de octubre venciese el contrato que une a los dos países del norte de África. Hasta ahora, llegaba por ahí una cuarta parte de las importaciones argelinas a España.
El cierre del gasoducto como consecuencia de la crisis diplomática se dio a conocer ya hace una semana y, desde entonces, los intentos de España para limar asperezas entre los dos vecinos de Magreb no han surtido efecto. A última hora del domingo, el Gobierno de Argelia certificó su decisión, que atribuyó al «carácter agresivo» del Reino de Marruecos.
La disputa ha obligado al Ministerio de Transición Ecológica a buscar una solución de emergencia para mantener las importaciones de gas desde Argelia, que representan casi la mitad de los suministros que llegan al país y juegan un papel clave en el sistema de precios de la electricidad durante la crisis energética.
Argelia compensará el bloqueo con un refuerzo de los envíos que actualmente viajan por el gasoducto de Medgaz, que conecta el país por una vía submarina directamente hasta el puerto de Almería. Los técnicos ya trabajan para mejorar la compresión y permitir que el flujo pase de los 8.000 millones de metros cúbicos al año a los 10.000.
Como este incremento no será suficiente para cubrir la actual demanda, el resto se enviará por el momento a través de barcos metaneros. Por el canal marítimo se trasladarán al menos otros 1.000 millones de metros cúbicos de gas en formato licuado. Algo que los expertos temen que acabe elevando su precio.
España cuenta con una reserva de gas de 40 días
A pesar de este hándicap en el camino, los suministros de gas no están amenazados. Enagás ha informado que actualmente el país cuenta con reservas suficientes para aguantar durante 40 días, incluso si dejasen de llegar por todas las vías las importaciones.
La compañía ha destacado la labor del Gobierno para reforzar las reservas de cara al tramo final del año. Las plantas de almacenaje de gas licuado están ya al 65% de su capacidad, mientras que los almacenamientos subterráneos han alcanzado el 82% para impedir cualquier problema de escasez.
«El Sistema Gasista español cuenta con unos niveles de capacidad contratada de gas natural superiores a la de inviernos anteriores en la misma fecha, y se encuentra en una situación mejor que la de otros países del entorno», han explicado desde Enagás.