España debe duplicar el reciclaje en cinco años para evitar sanciones de Europa
Eurostat suspende a España en todos los sistemas de reciclaje aplicados hasta ahora. Debe elevar del 30% al 50% los índices de reciclaje antes de 2020 para cumplir con la normativa comunitaria. Canarias plantea el próximo año obligar al usuario a retornar los envases para mejorar sus bajos índices de recuperación
A España se le acaba el tiempo para cumplir con los objetivos europeos de reciclaje fijados para 2020. En tan sólo cinco años, el país deberá duplicar sus niveles actuales de recuperación de residuos para alcanzar, como mínimo, el 50% exigido por Europa.
España se encuentra por debajo de la media europea en reciclaje y compostaje con unos índices del 20% y del 10% respectivamente. Con una incineración del 10%, el país deposita el 60% de su basura en vertederos, el sistema con mayor impacto medioambiental por los riesgos que implica en la contaminación de tierras y aguas subterráneas.
El gran déficit en el sistema de basuras español reside en el escasísimo nivel de reciclaje de restos orgánicos, que representan el 45% de los desperdicios generados en las áreas urbanas. «Habrá que mejorar en cinco años todo lo que ha avanzado España en las últimas décadas para poder cumplir con la normativa», explica Víctor Mitjans, director de Estudios de Retorna, una entidad sin ánimo de lucro que promueve el sistema de devolución de envases para garantizar un reciclaje cercano al 100%.
Creatividad estadística
El sistema de retorno obliga a los consumidores a devolver el envase en tiendas o supermercados. El consumidor recibe 10 o 20 céntimos por cada envase devuelto, una cantidad que paga por adelantado y que sólo recupera si lo entrega al punto de recogida. Es un esquema que funciona en Alemania y algunas regiones de Australia y Estados Unidos.
Los actuales gestores de la recogida de envases aseguran que el actual sistema de recogida en los contenedores amarillos, azules y verdes funciona y que España recicla el 70% de sus envases de plástico y cartón y más del 60% de sus botellas y envases de vidrio. Pero los detractores del actual sistema aseguran que los productores y envasadores (responsables de gestionar los residuos que generan) aplican la «creatividad estadística» para justificar los supuestos logros en materia de reciclaje.
«Ocultan parte de la producción de envases y luego contabilizan residuos, como los metales, para inflar los índices de reciclado, lo que da como resultado una cifra irreal», explica el portavoz de Retorna, que aglutina a sindicatos, y organizaciones ambientalistas y sin fines de lucro.
Los actuales gestores de Ecoembes, la entidad que gestiona la recogida de envases, asegura que el actual sistema es eficiente y que España no necesita el mecanismo del depósito para mejorar su recogida. También afirma que el actual sistema está auditado y que las cifras son fiables.
La factura se encarece
El grupo popular en el Senado ha advertido que los españoles deberán aceptar que la recogida de basuras será mucho más cara en los próximos años porque el Gobierno debe trabajar en la eliminación de vertederos, muchos de ellos ilegales.
Municipios y comunidades autónomas estudian nuevas vías para la gestión de residuos. De no alcanzar la media nacional de reciclaje, Canarias podría imponer el uso del sistema de depósito en algunas islas el próximo año. El pago del depósito puede ser una de las medidas que obligaría a elevar el reciclaje.