España avanza hacia una sociedad sin hijos (según el INE)
En el primer semestre de 2018, nacieron en España 179.794 bebés, la cifra más baja desde 1941
El drama de la demografía española continúa. En el primer semestre de este año, entre enero y junio, solo han nacido 179.794 bebés, la cifra más baja de toda la serie histórica que comenzó a elaborarse en 1941, según datos del INE. Además, supone el 5,8% menos que los alumbramientos registrados un año antes.
Al mismo tiempo que descienden los nacimientos, también aumentan las muertes. En el mismo periodo fallecieron 226.384 personas, el 2,1% más que en el primer semestre de 2017, con lo que el crecimiento vegetativo (nacimientos menos muertes) presentó un saldo negativo de 46.590 personas.
#MNP En el 1er semestre de 2018 se registraron 179.794 #nacimientos, un 5,8% menos que en el mismo periodo del año anterior. Estadísticas del Movimiento Natural de la Población. Nota de prensa: https://t.co/Ki2B8ip6Pk Resultados: https://t.co/kyBFDvtd9B #INE pic.twitter.com/3esB0Os2lQ
— INE España (@es_INE) 11 de diciembre de 2018
España avanza hacia el escenario que relata Una sociedad sin hijos (ED Libros), de Manuel Blanco Desar. El número de nacimientos continúa con la tendencia a la baja de los últimos años, sólo interrumpida en 2014, cuando nacieron 427.595 niños, casi 2.000 más que un año antes.
Los nacimientos han descendido en todas las comunidades autónomas, aunque de forma más acusada en La Rioja, donde cayeron un 13,7%, seguida de Extremadura, con un 10,3% y de Cantabria, con un 7,8%.
Una sociedad sin hijos
La caída de natalidad y cerrar la puerta a los inmigrantes en España llevan a las peores perspectivas sociales en cuanto a demografía. Poco a poco, España se acerca a Japón y Corea del Sur. Es decir, el tercer país más envejecido del mundo en 2050.
Así lo refleja en su libro Una sociedad sin hijos, de ED Libros), quien analiza detalladamente cómo ha sido la mutación o transición demográfica del país, en un camino sin salida hacia el colapso económico.
Según Blanco Desar, que asegura que «solo los tontos tienen hijos», las estadísticas de los últimos 30 años reflejan que sólo tienen hijos los llamados “trabajadores”. Los conocidos como “ricos” renuncian a la descendencia.
Además, defiende que sin políticas activas que lo reviertan, en una generación España será el tercer país más senil del mundo.
Blanco Desar afirma que España puede salir de la crisis sociodemográfica, pero que necesita recursos exteriores para poder mantener el estado del bienestar. Así, propone, como una de las soluciones, abrir las fronteras de Europa a la inmigración para salvar las pensiones, la Seguridad Social, educación y salud.