Errejón acelera su propuesta política en Andalucía frente al bloqueo de una candidatura conjunta

Las elecciones en Castilla y León trastocaron los planes de Iñigo Errejón. El líder de Más País ha decidido no presentar candidatura en el territorio presidido por el popular Alfonso Fernández Mañueco regalando la ‘bandera verde’ a Podemos e IU. La falta de estructura y presencia sobre el terreno se ha convertido en el mal endémico de varias formaciones. Sin embargo y con la vista puesta en estos resultados, el ex ‘número dos’ de Pablo Iglesias acelera su propuesta política en Andalucía frente al bloqueo de una candidatura unitaria.

Errejón se reunirá este miércoles en Madrid con la coalición donde se ha integrado con otras fuerzas andalucistas, Andaluces Levantaos, y también con Compromís para seguir tejiendo su propuesta política y conseguir ese escaño en el Parlamento que le otorgó recientemente el Centro de Estudios Andaluces. Los políticos están a la que salta y estos días ya se hablaba de que Valencia podría ser la próxima comunidad en adelantar comicios siguiendo la estela andaluza.

La alternativa de crecimiento de Más País reside en estos dos territorios con socios que bien podrían auparle en estos parlamentos, por lo que Errejón ha organizado este miércoles una reunión para coordinar trabajo y no quedarse pendiente de unos comicios donde ni siquiera participan. «Obviamente estaremos atentos a los resultados de Castilla y León y, a partir de ahí, sacaremos conclusiones», responden desde la formación.

Bloqueo a una candidatura conjunta

La coalición andalucista prefiere continuar trabajando de manera individual ante las proclamas de formar un «frente amplio», como pidió Díaz, y la petición de negociación a tres bandas con la formación de Teresa Rodríguez, Adelante Andalucía, y Unidas Podemos realizada por los morados el pasado 4 de diciembre. «Hubo un primer contacto que se quedó en nada. A día de hoy sigue sin haber conversaciones», confirman a Economía Digital desde las tres formaciones.

Tanto Rodríguez como Errejón, las dos escisiones de Podemos, prefieren seguir avanzando ante el evidente bloqueo a una candidatura conjunta para frenar a la derecha en la Junta. «Todo continúa muy embrionario. Venimos de donde venimos, de un proceso de ruptura por diferentes razones», señalan desde la dirección de Adelante Andalucía.

La líder andaluza de Más País, Esperanza Gómez, apunta en la línea de Adelante Andalucía al recordar en una entrevista que «quedan muchas heridas por las cosas que han pasado entre Adelante y Unidas Podemos», a la vez que aboga por «ofrecer una alternativa para quienes no votan a las fuerzas que ya existen».

Sin embargo, en Unidas Podemos consideran que «aún hay tiempo para sentarse y hablar». «Lanzamos el manifiesto por un ‘frente amplio’ en Andalucía bajo la necesidad que vemos y compartimos con mucha gente de movimientos sociales de ir a la búsqueda de una sola candidatura. Todavía hay tiempo», insisten.

Castilla y León evaluará la suma de siglas de la izquierda

Tanto en Más País, como en Podemos o Compromís existe cierta incertidumbre acerca del proyecto de Yolanda Díaz. La mayoría considera que los planes de la vicepresidenta no pasan por darse a conocer en Castilla y León ni en Andalucía por el alto porcentaje de posibilidades de estrenarse con un resultado pobre. «Creo que Yolanda es más lista y no se expondrá. Además, es mejor hacer las cosas con calma que metiendo prisa a la gente», sostienen desde Compromís.

Muy comentadas son las reticencias de Errejón frente a su compañera Mónica García de unirse al proyecto de la vicepresidenta. Una de las bazas que podría jugar el líder de Más País para no entrar serían los resultados en Castilla y León.

Si la alianza de Podemos e Izquierda Unida se da un batacazo, podrá incidir en que la mera suma de siglas no construye mayorías para alejarse de Díaz. En la formación piensan que su figura no actúa con el efecto aglutinante que cumple en otras geografías, incluida Madrid.

Desde la formación de Teresa Rodríguez recuerdan que la unión de la izquierda tampoco sumó para ellos en 2018. La marca fue una fórmula integrada por Izquierda Unida, Podemos y dos formaciones herederas del PA, Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza. La coalición perdió tres escaños respecto a las listas separadas que presentaron Izquierda Unida y Podemos tres años antes dejándose 280.000 sufragios.

De cara a los próximos comicios en Andalucía, la formación de Rodríguez apuesta por que haya más oferta que movilice de izquierdas para que los votantes que tradicionalmente son abstencionistas salgan a votar.

Mientras que en Podemos se puede sentir el miedo a la «sopa de siglas». «Apostamos por una fórmula en la que nadie tenga que renunciar a su espacio. Hay que buscar el modo de que todos estén cómodos para discutir las cuestiones políticas sin renunciar a ciertas posiciones. Ir por separados nos perjudica. La mejor fórmula es la candidatura unitaria», sostienen.

Pero, de momento, los primeros contactos de Podemos con Gómez y Rodríguez no han fructificado en nuevas llamadas o en una reunión. «Todo sigue como estaba», aclaran las tres formaciones. Ninguna de las siglas quiere renunciar a la baza de presentarse con una candidatura netamente andaluza. 

Desde Anticapitalistas recuerdan que la exigencia de autonomía fue uno de los detonantes del desencuentro entre Rodríguez y la dirección de Pablo Iglesias. De cara a estos comicios la desconfianza impera más que el diálogo.

Los morados esperan que, pasados los comicios en Castilla y León, el próximo 13 de febrero, el panel de juego en Andalucía se vaya abriendo a conversaciones entre las diferentes fuerzas. Por si acaso, desde Más País comienzan a hacer los deberes reuniendo a su coalición andaluza y a sus posibles en Valencia (Compromís) para coordinar una estrategia y posible alianza.