ERC y PSC presionan a Junts para desbloquear la renovación de TV3
Republicanos y socialistas coinciden en profesionalizar a los 'consellers' de la CCMA y del CAC, y están a la espera de la posición del partido de Puigdemont
La renovación del gobierno de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals (CCMA), la empresa pública que gestiona TV3 y Catalunya Ràdio, es uno de los retos pendientes de esta legislatura. ERC y PSC coinciden en la necesidad de renovar los cargos del Consell de Govern del ente audiovisual, caducados desde hace años y cuestionados por su servidumbre política.
Republicanos y socialistas muestran sintonía en profesionalizar a los consellers de la CCMA, y también del Consell de l’Audiovisual de Catalunya (CAC) –el órgano fiscalizador de los contenidos audiovisuales en Cataluña–. Según han explicado a Economía Digital fuentes de ambos partidos, pese a la urgencia, dudan de la predisposición de Junts para desbloquearlo.
«Nosotros entendemos la dirección [de la CCMA y del CAC] no como un órgano político, y lo queremos profesionalizar, aunque ellos [Junts] todavía lo ven como su casa», explican fuentes republicanas a este medio. Tanto socialistas como ERC creen que la renovación irá para largo, posiblemente hasta finales de 2021.
Los socialistas consideran que están «a la espera de Junts» para renovar el órgano, aunque reconocen que todavía no se han puesto a negociar con ellos «en serio». Creen que la situación de caducidad permanente ya les va bien a los ‘junteros’, puesto que las presidencias de ambos órganos están en manos de personas afines al espacio posconvergente.
El Parlament aprobó en 2019 que la renovación de la CCMA y del CAC se tuviera que hacer por mayoría de dos tercios, y no con mayoría absoluta, como impuso Artur Mas con el apoyo del PP cuando llegó al poder. Además, los presidentes de TV3 y Catalunya Ràdio se tendrán que escoger por concurso público.
Llorach y Loppacher, hijos del ‘pujolismo’
La presidenta en funciones de la CCMA, Núria Llorach, lidera la empresa que gestiona TV3 y Catalunya Ràdio a la espera de que su cargo se renueve. Es un perfil fuertemente ligado al pujolismo y a los gobiernos de Artur Mas, puesto que fue presidenta del Institut Català de les Dones (ICD), durante varios gobiernos del fundador de CDC.
Llegó al cargo de presidenta en funciones de la CCMA como consecuencia de la dimisión de Brauli Duart como presidente de la empresa pública, que fue nombrado en 2008 y estuvo al frente de la institución hasta que la abandonó en 2016. No obstante, Llorach estaba en el audiovisual desde el año 2000, cuando fue designada consellera del CAC.
El primer mandato de Llorach en el ente regulador del audiovisual catalán terminó en 2002, pero fue reelegida para un nuevo turno de seis años, que concluyó en 2008. Logró entonces una plaza en la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals, a propuesta de CiU, y que ha ocupado de forma continuada hasta la actualidad.
Una trayectoria similar tiene el presidente del CAC, Roger Loppacher. El actual director del ente regulador debe también su carrera política al pujolismo. Ocupó varios cargos en el ‘sottogoverno’ de la Generalitat hasta la llegada del tripartito. En 2008, Artur Mas le nombró vicepresidente de la CCMA, hasta que en 2012 entró al CAC a propuesta de CiU.
Loppacher ha liderado varias polémicas sobre la falta de pluralidad de TV3 y Catalunya Ràdio, al avalar constantemente la pluralidad pese al deje independentista de la CCMA. En cuanto al gobierno del CAC, está caducado: el mandato de todos sus ‘consellers’ ha cumplido y hay vacantes fruto de dimisiones pendientes de ser sustituidas.
Sanchis, el ‘rebelde’ de Junts
Otro de los cargos vinculado al mundo convergente es el del director de TV3, Vicent Sanchis. Su nombramiento causó preocupación en parte de la plantilla del ente público, y en 2017 fue reprobado por el Parlament gracias al voto de todos los grupos salvo el de Junts pel Sí (la coalición entre ERC y CDC para las elecciones de 2015).
El actual director se ha alejado del mundo posconvergente. Unas grabaciones que se filtraron entre la tertuliana Pilar Rahola y el empresario David Madí reconocían que no habían controlado suficientemente bien a TV3 y lamentaban que se hubiera rebajado el tiempo que la periodista disponía en la cadena para sus monólogos: «Esto se lo haremos pagar a Sanchis».
Otro de los cargos pendientes de renovar es el de Saül Gordillo, nombrado a propuesta de ERC como director de la emisora radiofónica y que Núria Llorach intentó derrocar tras la salida de la periodista Mónica Terribas de El Matí de Catalunya Ràdio, que se fue entre acusaciones indirectas de injerencias de la dirección del medio.