ERC pone su «línea roja» a Sánchez: sin amnistía no hay investidura

ERC ha dejado claro cuál es su «línea roja» para apoyar la investidura del presidente en funciones y candidato socialista a presidir el Gobierno, Pedro Sánchez. Pues, la diputada de ERC en el Congreso de los Diputados, Teresa Jordá, ha remarcado que si no se impulsa una Ley de Amnistía, los republicanos no votarán a favor de la investidura de Sánchez.

Las declaraciones de Jordá llegan después de que ERC diera su apoyo a la candidata socialista a presidir la Mesa del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, que finalmente salió elegida gracias a los votos de los 7 parlamentarios republicanos, pero también de los 121 diputados del PSOE, 31 de Sumar, 7 de ERC, 7 de Junts, 6 de Bildu, 5 de PNV y 1 de BNG.

Según desgranó el portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián, el acuerdo que han alcanzado con los socialistas para lograr su apoyo pasaba por “garantizar el uso del catalán y de otras lenguas oficiales en sesiones plenarias”, activar una comisión sobre el uso de Pegasus y continuar con la desjudicialización del conflicto catalán.

Impulsar una Ley de Amnistía

Sobre este último punto, Jordà ha querido matizar que, para los republicanos, la desjudialización conlleva no solo que los socialistas «dejen tramitar» una Ley de Amnistía, sino que también sean capaces de «tirarla adelante», ha concretado durante una entrevista en la emisora de radio RAC1. Entonces, ha aprovechado para justificar su apoyo a los socialistas y asegurar que era «extremadamente necesario» que hubiese una Mesa, sin la que es imposible hacer política, aunque sea con el Estado.

En cuanto a la negociación para la presidencia de la mesa del Congreso de los Diputados, ha atribuido a los «matices en las condiciones» el anuncio del acuerdo la mañana de este jueves. «A las 12 de la madrugada enviaron un documento que ya empezaba a garantizar los acuerdos», ha indicado en alusión a los socialistas para después explicar que acabaron de matizarlos a primera hora del jueves antes de la constitución de las Cortes Generales.

«Siempre ha habido contactos con los compañeros de Junts», ha asegurado Jordà desde las elecciones municipales celebradas el pasado 28 de mayo, tanto desde el Parlamento de Cataluña como desde Madrid, que se mantienen con la vista puesta en la investidura. En esta línea, ha destacado que la prioridad para los republicanos es negociar desde un frente común con Junts. «Ahora tenemos compañeros independentistas en el Congreso con ganas, a priori, de negociar y de avanzar, en el país y sobretodo en nuestra causa», ha subrayado.

Bildu quiere abordar la «cuestión» territorial «sin prisas»

Unos planteamientos con los que ha coincidido la diputada de EH Bildu en el Congreso de los Diputados, Mertxe Aizpurua, que ha recalcado que su formación política planteará en la negociación para la investidura la «cuestión» territorial, un tema que, según ha incido, se debe abordar «sin prisas, ni urgencias».

«Esta legislatura debe ser la que abra caminos, que han estado cerrados durante décadas y décadas y a los que hay que ponerles una senda de evolución«, ha destacado en referencia al «tema territorial» que, a su juicio, demanda la sociedad vasca. Así, ha valorado que se trata de una «cuestión pendiente», puesto que el «Estado de las autonomías» que se dibujó en 1978 «no responde a las necesidades de Euskal Herria ni tampoco soluciona los problemas para el resto».

Con todo, ha evitado concretar las demandas de la formación vasca para dar su apoyo en la investidura, ya que es «una forma de negociar que ha dado muchos y muy buenos resultados». «Somos muy discretos a la hora de negociar y, hasta que no tenemos atadas las cosas, no acudimos a los medios de comunicación ni para hacer órdagos ni para arrogarnos medallas».

Armengol, partidaria de que el Congreso represente la «riqueza lingüística»

Por su parte, la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, ha insistido en que trabajará para garantizar el uso del catalán, el euskera y el gallego en la Cámara Baja «lo más pronto posible», a la vez que ha expresado su intención de dialogar con todos los grupos parlamentarios acerca de esta cuestión.

Después de hacer hincapié en la importancia de «buscar acuerdos», ha incidido en que comenzará a trabajar para establecer fórmulas para que el «uso de todas las lenguas sea una realidad en el Congreso de los Diputados», de manera que se puedan garantizar «los derechos lingüísticos de todos los españoles.

A ojos de Armengol, se trata de un «avance importantísimo», puesto que el Congreso de los Diputados ha de «presentar a la España real y una de sus mayores riquezas es la diversidad lingüística.