ERC amplía su ventaja sobre Junts en las encuestas tras la disputa de la mesa de diálogo
La formación de Pere Aragonès se afianzaría como la primera fuerza política con un botín de 40 escaños en el Parlament, según GAD3
La brecha que se ha abierto en el seno del independentismo por la mesa del diálogo ha sonreído a Esquerra Republicana. La formación de Pere Aragonès ha crecido en las encuestas, después de haber impulsado las negociaciones con el Gobierno de Pedro Sánchez y de haber dejado fuera a sus socios en la Generalitat.
Un sondeo elaborado por GAD3 para La Vanguardia ha estimado que los republicanos obtendrían en unos nuevos comicios casi el 30% de los votos, lo que les convertiría en la primera fuerza política y les permitiría aspirar a revalidar la presidencia. El resultado se traduciría en un botín de entre 39 y 40 escaños en el Parlament.
La encuesta ha confirmado el éxito en la estrategia de Pere Aragonès desde que llegó a la Generalitat. Sus críticas a la vía unilateral y su apuesta por el diálogo han definido el arranque de la legislatura. Ahora, los números le dan un resultado todavía mejor que los 33 escaños que obtuvo en los pasados comicios y que ya le sirvieron para formar gobierno.
Junts retrocede en las encuestas en pleno pulso con el Gobierno
El enfrentamiento interno en el independentismo sí que ha debilitado a Junts. La formación neoconvergentee obtendría en unos nuevos comicios 27 diputados, lo que le dejaría relegado de nuevo como la tercera fuerza política, aunque le seguiría dando una fuerza parlamentaria suficiente como para negociar su entrada en le Generalitat.
El partido de Carles Puigdemont perdería cinco diputados y casi tres puntos porcentuales de voto con respecto al resultado logrado el pasado 14 de febrero. Han pagado los platos rotos de la pugna interna de la Generalitat, aunque la consulta se realizó antes de que se diese a conocer la detención de Carles Puigdemont en Cerdeña que ha cerrado filas entre el independentismo.
El expresidente ya evidenció este sábado sus críticas por la exclusión de su formación de la mesa de diálogo. «Puede dar la sensación de que el Gobierno solo quiere dialogar con los que le dan soporte parlamentario», afirmó en su primera rueda de prensa desde que fue liberado provisionalmente por la Justicia italiana.
El independentismo conserva una mayoría suficiente para gobernar
También ha protagonizado una caída en las encuestas la CUP. La formación de Dolors Sabater se ha desinflado después de un arranque de la legislatura en la que ha tenido un perfil más bajo ya que se mantiene fuera de la coalición de gobierno. Si hubiese unas nuevas elecciones, cederían 3 escaños en el Parlament hasta quedarse con 6.
A pesar de esta retroceso, las cuentas siguen dando en el ala independentista para revalidar un nuevo gobierno con el objetivo de alcanzar el derecho de autodeterminación en Cataluña. Entre las tres formaciones, sumarían un total de 80 diputados autonómicos. Son 12 puntos por encima del umbral que marca la mayoría absoluta.
La encuesta de GAD3 muestra que apenas habría transferencia de voto dentro del bloque independentista. Solo un 4% de los votantes de Junts se pasaría ahora al bando de ERC. Mientras que destaca que un 7% de los de la CUP optarían ahora por la formación de Puigdemont. Aunque están en las antípodas políticas, sí que comparten su estrategia rupturista por la independencia.
El PSOE se afianza en el bloque constitucionalista
La encuesta deja sin posibilidades de lograr una victoria del bloque constitucionalista en las elecciones catalanas, aunque mantiene el tirón del PSOE después de que hayan pasado meses de la llegada de Salvador Illa al poder. La formación se consolidaría como segunda fuerza política con e incluso lograrían un escaño más, hasta los 34. ç
También destaca el crecimiento de los comunes que lograrían llegar hasta los comunes que llegarían hasta los 10 diputados en el Parlament. Son dos puntos por encima de la marca del 14-F, lo que despierta la posibilidad de un gran acuerdo de izquierdas junto con socialistas y republicanos. Aunque para eso habría que resolver primero el conflicto de la independencia.
En el bloque de la derecha, destaca la ligera recuperación del Partido Popular, después del batacazo de las últimas elecciones. La formación de Alejandro Fernández doblaría su representación parlamentaria. Pasaría de los 3escaños que actualmente le sitúan como la última fuerza del Parlament a los 7.
Los populares crecerían a costa de Ciudadanos que continúa su caída libre en toda España. La formación liberal se quedaría como el farolillo rojo con apenas 3 representantes. También perdería fuerza Vox. Si hubiese unos nuevos comicios perderían hasta tres diputados autonómicos, pasando de 11 a 8.