Empresarios se rebelan contra la política fiscal y laboral de Sánchez
Patronales y organizaciones empresariales advierten de que las propuestas presentadas por PSOE dañarían las inversiones y la competitividad de las compañías
Los empresarios empiezan a temer las consecuencias económicas de las propuestas que el PSOE ha hecho públicas esta semana de cara a alcanzar un acuerdo de gobierno con Unidas Podemos. Las principales patronales y organizaciones empresariales acusan a Pedro Sánchez y su equipo de plantear un programa que mermará la competitividad de las compañías españolas, dañará las inversiones, reducirá el crecimiento económico y retrasará la reducción del déficit.
«No parece la política más adecuada en un contexto de desaceleración de la economía y ralentización de la creación de empleo», advierten los respresentantes empresariales, quienes también avisan del «arriesgado» plan de Sánchez, que agudizaría la recesión económica.
Según recoge este jueves Expansión, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), el Círculo de Empresarios, el Club de Exportadores, la Federación de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA) o la Cámara de Comercio de EEUU en España (AmCham) estarían detrás de estas advertencias.
Los empresarios se han rebelado contra el hachazo fiscal que provocaría la aplicación del programa del PSOE, así como contra la contrarreforma laboral que se ha planteado en varias ocasiones, tanto por parte de los socialistas, como por el lado de su posible socio de gobierno, Unidas Podemos, que podría frenar la creación de empleo.
«En un mundo con cada vez menos fronteras económicas, la búsqueda de aumentos de recaudación a corto plazo resta atractivo fiscal para las compañías y conduciría a nuestras empresas a una pérdida de competitividad», insiste el presidente de laConfederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi.
Cualquier posibilidad de que Unidas Podemos entre a formar parte del Gobierno pone en alerta a Garamendi. El líder de la patronal ya ha reiterado en varias ocasiones que el organismo prefiere un Gobierno estable y moderado, que pasa por no incluir al partido liderado por Pablo Iglesias. De hecho, no ha ocultado que sus preferencias pasan por gobiernos centristas porque «encajan mejor con la economía que los gobiernos con opciones políticas más extremas».
Repercusión en las cuentas públicas
La ralentización económica global ya se ha empezado a notar en España. Los datos de empleo publicados esta semana demuestran la creciente debilidad del mercado laboral. En esta misma línea, la pérdida de dinamismo de la industria, el turismo o las inversiones también se está viendo mermada por la desacelración económica.
La subida de impuestos planteada por Sánchez «será insuficiente» para compensar el aumento de gastos, por lo que el ajuste del déficit público se complicará. Además, el problema que España tiene con su deuda pública, estancada en torno al 100% del PIB, también ensombrece las perspectivas económicas¡
Según el diario económico, con la continua expansión de gastos del Ejecutivo ya se prevé un desfase entre este año y el próximo de 32.000 millones de euros más de lo que marca el objetivo de déficit pactado con Bruselas.