El vicepresidente Iglesias no aplaude al Rey en el aniversario del 23F
El líder de Podemos no aplaudió el discurso del monarca ni el de la presidenta del Congreso, quienes advirtieron sobre la fragilidad de la democracia.
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, no ha aplaudido al jefe del Estado al término del discurso que ha pronunciado en el Congreso con motivo del 40º aniversario del 23F. Una fecha que conmemora el triunfo de la democracia y de la Constitución Española frente al fracaso de la intentona golpista.
En un acto reducido en el Salón de Pasos Perdidos, Felipe VI ha participado en el acto conmemorativo organizado por Meritxell Batet, presidenta de la Cámara Baja, quien también se ha dirigido a los asistentes y cuyo discurso tampoco ha sido aplaudido por el líder de Unidas Podemos.
Iglesias se sentó, por protocolo, en segunda fila junto a las tres vicepresidentas del Ejecutivo, Carmen Calvo, Nadia Calviño y Teresa Ribera.
El líder de Podemos ni se inmutó por el discurso de la presidenta del Congreso que recalcó la fragilidad de la democracia y tampoco se manifestó durante el discurso del monarca, quien ensalzó la «firmeza y autoridad» del Rey Juan Carlos además de defender que España es una democracia «consolidada» a diferencia de lo que opina Iglesias.
En las inmediaciones del Congreso, y en declaraciones a los periodistas, Iglesias consideró que «no es aceptable» que exista todavía una ley de secretos oficiales que, según el vicepresidente segundo, impide a los españoles conocer lo que «realmente pasó» el 23 de febrero de 1981.
Podemos insiste en que se tiene que reforzar la democracia
Unidas Podemos pidió que el aniversario de los 40 años del intento de golpe de estado del 23F no se utilice para «hacer una salvación mítica del pasado» ni para «blanquear el neofranquismo» sino que se reconozca que la democracia española es «imperfecta» y «debe perfeccionarse».
Así se expresó en representación del grupo de Unidas Podemos en el Congreso el secretario primero de la Mesa, Gerardo Pisarello, que, en una rueda de prensa, dijo que «el mejor compromiso con la democracia hoy pasa por reconocer sus límites».
En ese sentido, dijo que en medio de una pandemia, Unidas Podemos seguirá batallando por «cosas concretas que tienen que ver con la democracia», por que se acabe con la inviolabilidad del rey y por evitar -ha añadido- que se pueda ir a prisión «por cantar canciones».
Por su parte, el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, aseguró a través de Twitter que España sigue en deuda con los capitanes y comandantes de la Unión Militar Democrática que «pagaron con la humillación su compromiso democrático».
«El 23F altos mandos militares dieron un golpe de Estado ante el entusiasmo de muchos sectores del Ejército. Yo quiero recordar hoy a los capitanes y comandantes de la Unión Militar Democrática que pagaron con la humillación su compromiso democrático. Seguimos en deuda con ellos», ha escrito Iglesias.