El Supremo se pronunciará esta semana en contra de los indultos del ‘procés’
Los magistrados se alinearán con la Fiscalía para mostrar su rechazo a la medida de gracia que estudia el Gobierno de Pedro Sánchez
El exvicepresidente de la Generalitat y principal acusado, Oriol Junqueras, durante la tercera jornada del juicio del «procés» en la Sala de Plenos del Tribunal Supremo
El Gobierno de Pedro Sánchez está allanando el terreno para poner en marcha una de las decisiones más controvertidas de su legislatura: el indulto de los políticos presos tras el juicio del ‘procés’. La decisión definitiva recaerá sobre el Consejo de Ministros, sin embargo los jueces deberán adelantar su posición con un dictamen que está previsto que se difunda esta misma semana.
El Tribunal Supremo contempla emitir su informe sobre la medida de gracia que permitiría sacar de la cárcel a los miembros de la cúpula independentista antes del domingo. La posición de los magistrados será previsiblemente negativa, según han informado fuentes jurídicas a Europa Press. Sin embargo, no se trata de una decisión vinculante.
Su posición se suma a la de la Fiscalía que también se ha opuesto a la liberación de la cúpula independentista, debido a la gravedad de los delitos, mientras que la Abogacía del Estado ha evitado posicionarse al considerar que no se trata de una decisión de su competencia.
Si finalmente el Gobierno sigue adelante con el proceso, la puesta en libertad de los condenados se logrará en un breve espacio de tiempo. Incluso si el indulto se aplicara solo de forma parcial sobre algunas de las penas que pesan sobre los políticos independentistas, su situación penitenciaria avanzaría hacia un tercer grado de semilibertad.
Esta es solo la primera vez que el Tribunal Supremo se verá obligado a tomar parte activa en el proceso. Si el Ejecutivo mantiene su hoja de ruta y los presos abandonan la cárcel, los magistrados tendrán que responder a los hipotéticos recursos presentados por las partes afectadas.
Juan Carlos Campo resta importancia a los indultos: «Hay que verlos con naturalidad»
La posición del Tribunal Supremo será una de las valoraciones que llegarán hasta el Ministerio de Justicia, encargado de tramitar definitivamente los indultos y de presentarlos ante el Consejo de Ministros. Hasta ahora, ninguno de los miembros del Gobierno se ha negado a aplicar la medida de gracia.
El propio ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha advertido que hasta que no lleguen los documentos no se podrá revelar la posición definitiva del Ejecutivo, aunque ha mandado un mensaje de tranquilidad para restar importancia al proceso. «Hay que verlos con naturalidad, sea favorable, desfavorable, total o parcial», ha expuesto.
El ministro socialista ha defendido que los indultos son «instrumentos previstos en la ley» y que por lo tanto hay que afrontar el debate con serenidad. «Parece que los indultos del ‘procés’ son todo uno. No, el indulto es una cosa que se pide para una persona y, por tanto, cada expediente tendrá vida propia», ha agregado.
El PP recurrirá los indultos si el Gobierno los aprueba
La inminente valoración del Tribunal Supremo ya ha forzado al resto de formaciones de la oposición a posicionarse sobre la medida de gracia. El Partido Popular ha vuelto a reafirmarse en su decisión de recurrir ante la Justicia los indultos si finalmente los aprueba el Consejo de Ministros.
El portavoz nacional de los populares, José Luis Martínez Almeida, ha afeado a Pedro Sánchez que la medida de gracia sea un «pago a plazos» en favor de las formaciones independentistas a cambio de su apoyo parlamentario a lo largo de la legislatura. «Habrá que ver si se atreven contra el criterio del Tribunal Supremo y de la Fiscalía que, en todo caso resuelve el problema de Pedro Sánchez para seguir en la Moncloa», ha señalado el alcalde de Madrid.
Hasta ahora se han presentado hasta siete peticiones diferentes de indulto a favor de los presos de la cúpula independentista, tanto a nivel particular como grupal. Oriol Junqueras, Dolors Bassa, Joaquim Forn, Raúl Romeva, Jordi Turull, Santi Vila, Meritxell Borràs, Carles Mundó, Carme Forcadell, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart serían los beneficiados. Sus delitos van desde la rebelión hasta le desobediencia.
