El sector conservador del CGPJ elige a Tolosa y Lucas como candidatos al TC
Los vocales conservadores del Consejo General del Poder Judicial también han registrado un escrito que reitera la petición de convocar un pleno extraordinario
Los vocales conservadores del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) han elegido a los magistrados del Tribunal Supremo César Tolosa y Pablo Lucas como sus candidatos para el Tribunal Constitucional. Lo han hecho en una nueva petición de pleno extraordinario al presidente del Consejo, Rafael Mozo, que culmine los nombramientos al tribunal de garantías con las reglas vigentes.
Mozo rechazó este martes la petición de los vocales conservadores de convocar este pleno extraordinario porque no habían aportado los nombres de los dos candidatos conforme a las reglas pactadas. Fuentes del bloque conservador han reconocido que «es cierto que hay un defecto formal» porque, de acuerdo a las reglas del procedimiento fijadas el pasado 8 de septiembre, «había que aportar nombres y eso no se hizo» el pasado viernes.
Por ello, este miércoles se han reunido, han registrado un escrito que reitera la petición de convocar un pleno extraordinario y añaden sus candidatos: el presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo, César Tolosa, y el magistrado de esta misma Sala, Pablo Lucas, a quien prefieren en vez de a José Manuel Bandrés, porque ven en él un perfil próximo al Gobierno.
Coincidirá con la tramitación de la reforma legal del Constitucional
Es la primera vez que el bloque conservador desvela al fin los nombres de sus aspirantes, aunque está por ver ahora cómo reaccionan los progresistas, toda vez que recientemente respaldaron a Bandrés como su candidato, pese a las presiones de los conservadores.
Lo que está claro, según indican fuentes jurídicas, es que ese pleno extraordinario se va a celebrar «seguro antes del 22 de diciembre», que es cuando está fijado el pleno ordinario que iba a votar los nombramientos y que podría coincidir con la tramitación, ya en el Senado, de la reforma legal de PSOE y Unidas Podemos que busca desarmar la estrategia de bloqueo de este mismo grupo que impide la renovación del TC.
Los partidos que sustentan el Gobierno han introducido unas enmiendas a la reforma del Código Penal que establecen un mandato imperativo con un calendario para la renovación de los dos magistrados del TC que competen al Consejo y que abre la puerta a responsabilidades penales a aquellos vocales que incumplan la ley, como ocurre actualmente.