El PSOE espera los resultados del 14F para redefinir su relación con Iglesias
La tensión entre las dos formaciones que componen el Gobierno es "insoportable", según varios ministros socialistas, que adelantan: "Esto va a cambiar".
Las elecciones que Cataluña celebra este domingo marcarán un antes y un después en el Gobierno de coalición. La tensión entre PSOE y Unidas Podemos es «insoportable», según los socialistas. «Esto va a cambiar», señalan. La actitud del vicepresidente Pablo Iglesias ha colmado la paciencia de la mayoría de ministros del PSOE, quienes temen que los resultados del 14F aporten más tensiones dentro de la coalición. Varios de ellos apuestan por redefinir la relación con Podemos dentro del Gobierno.
El malestar ya es patente entre los ministros del PSOE. El último ataque a la Monarquía y el cuestionamiento de la calidad de la democracia en España impiden, a las pocas voces que lo defendían, seguir justificando a Iglesias. El presidente ya es consciente del clamor del partido por ponerle freno.
El primitivo grito de los históricos y dos barones territoriales ha llegado a las federaciones, que cambian de consigna para decirle a Sánchez «con Iglesias no». El manifiesto firmado por más de 200 socialistas ha calado en el Consejo de Ministros, tanto para el PSOE como para Podemos. La tensión mediática sólo ha llevado a estirar la cuerda entre las dos formaciones y a que se escuchen más sus broncas que sus propuestas. Los dos partidos son conscientes de ello.
Redefinir la relación con Iglesias
Fuentes del Ejecutivo temen que a partir de este domingo la tensión vaya a más en la coalición. Recuerdan que el pésimo resultado de Podemos en las pasadas elecciones gallegas y vascas derivó en «plantar cara al Gobierno para que se nos escuche», resaltan. En la Ejecutiva de Podemos se habló de continuar con la tensión mediática a sus socios de Gobierno para marcar perfil propio y lograr ser vistos como alternativa de Gobierno.
Los constantes ataques de Iglesias y miembros de Podemos hacia los ministros socialistas, como Margarita Robles o José Luis Escrivá, y las declaraciones públicas cuestionando los pilares del Estado han cargado las tintas de varios ministros. «Esto va a cambiar», repiten constantemente.
Temen que un batacazo de En Comú Podem en las urnas este domingo les lleve a conocer una faceta de Iglesias más radical e intransigente ante los proyectos que deben negociar ambos partidos para sacarlos adelante. «Nos sentaremos las veces que haga falta», repiten fuentes del PSOE en el Congreso.
La última reunión para revisar el funcionamiento de la coalición fue la que más tensión hubo, según fuentes socialistas. El miedo que surge ahora por parte de los de Sánchez no es que defiendan el «somos dos partidos diferentes», sino que pasen a defender el «somos dos gobiernos en uno».
Por ello, algunos ministros consideran que hay que redefinir la relación con Iglesias tras las elecciones catalanas. El cómo todavía no se atreven a desvelarlo. Cabe recordar que la profunda remodelación que se planteó hacer el presidente tras el pasado verano nunca llegó. De ahí se pasó directamente a hacer «cambios puntuales» por la inminente campaña electoral, con la entrada de Miquel Iceta a Política Territorial y Carolina Darias ocupando el puesto de Salvador Illa en Sanidad.
El ex ministro medirá sus fuerzas este domingo contra los independentistas para configurar el nuevo tablero catalán en la Generalitat y las posibles repercusiones que ello tenga a nivel nacional.
Los socialistas reconocen que Podemos no quiere ni oír hablar de «cambios» en el Gobierno. Las fuentes de Podemos, cuando les preguntas por este tema, siempre se remiten al acuerdo de Gobierno de coalición y a señalar que dichos cambios tendrán que respetar el porcentaje obtenido por Podemos en las urnas y la venia del partido para hacerlos. «No pueden hacer nada unilateralmente», destacan.
Uno de los rumores que corre entre los morados es que Sánchez, en cuanto pueda sostenerse con otra mayoría, romperá el acuerdo de coalición con ellos. Siguen sin fiarse de los socialistas, a pesar de ser socios de Gobierno. Por eso resulta tan importante para Iglesias rearmar cuanto antes el partido y los territorios. La deriva de Moncloa dependerá en su mayoría de lo que suceda esta domingo.