El PSC quiere saber qué defiende
Navarro convoca un consejo nacional extraordinario para responder al sector crítico
Un dirigente como Josep Borrell, que arrasó en las elecciones primarias del PSOE en Catalunya en 2000 para elegir al candidato socialista a la Moncloa frente al entonces secretario general Joaquín Almunia, –y en contra del pronóstico de todos los analistas catalanistas del momento– dejaba constancia este lunes en una tertulia en Rac1 del problema del PSC. “La desorientación del elector socialista puede ser total”.
Lo decía como respuesta a las pullas del ex diputado Toni Comín al acuerdo del PSC con el PSOE sobre la llamada Declaración de Granada, en referencia a la reforma constitucional en clave federal que se ha propuesto.
Y es que el PSC es ahora un partido sumido en una gran indefinición. No de forma oficial, porque la dirección del partido ha asumido, con todas las consecuencias, un camino. Pero ese camino, que pasa por no seguir las directrices de CiU y ERC sobre la consulta soberanista, está lleno de incertidumbres. En gran medida porque hay dirigentes del PSC, ex consellers y ex diputados, con gran presencia mediática que discrepan de forma diáfana y contundente de Pere Navarro, y de sus principales colaboradores, llámese Antoni Balmón o Maurici Lucena.
Obiolistas, de nuevo
Pero no hay grandes novedades, salvo algunos versos sueltos que pueden ser importantes a medio plazo. Los ex obiolistas, la corriente más catalanista del PSC que se enfrentara en su momento a los ‘capitanes’, los dirigentes territoriales –alcaldes y aparato del partido– se han hecho mayores, pero mantienen sus posiciones. Son Daniel Font, y Jordi Font, Pere Oriol Costa o Maria Badia. Todos ellos parten de la plataforma Nou Cicle, obiolista, que lidera Raimon Obiols.
Pero ésta se ha dividido en dos segmentos, por una cuestión básicamente generacional: por un lado Avancem, que encabeza el diputado Joan Ignasi Elena, o el miembro de la ejecutiva Jordi del Río, y por otro Fórum Cívic, que agrupa a ex consellers como Marina Geli, Montserrat Tura, Joaquim Nadal o Antoni Castells, con más o menos compromiso. Entre esos sectores, con alianzas entrecruzadas, se sitúan la ex diputada Laia Bonet, o Rocio Martínez.
Ante todos esos movimientos, Pere Navarro ha convocado un consejo nacional extraordinario este domingo, con el objetivo de clarificar posiciones. Porque, como admite un miembro de la dirección, “no se puede defender un discurso concreto en esas condiciones”.
Primarias a la Generalitat
En el consejo nacional se espera que se pronuncien con claridad todos los que discrepan de la línea oficial, y que consideran que el PSC no puede quedarse al margen del Pacto Nacional por el Derecho a Decidir, y que la sociedad catalana “no comprará” el acuerdo federalista que propone la dirección socialista.
El PSC quiere, en realidad, saber cuánto antes qué defiende. Como apunta Borrell, su electorado lo espera desesperadamente.
Y una de las posibilidades, que se comienza a tener en cuenta, tanto desde la dirección del PSC como desde los sectores críticos, es avanzar las elecciones primarias a la candidatura a la Generalitat. Las personas representan proyectos, aunque en el PSOE lo ven al revés. Y sera una Conferencia Política, en noviembre la que marque los postulados, para elegir, posteriormente, en unas primarias, al candidato a la Moncloa.