El PSC pasa a Colau la patata caliente con Valls
Laia Bonet (PSC) recuerda a Colau que no tiene ningún tipo de acuerdo con su formación y le pide que tome la iniciativa
El PSC trasladó este viernes a Ada Colau toda la responsabilidad para conseguir los votos necesarios que le permitan la investidura en el pleno del 15 de junio. Esta responsabilidad incluye el desgaste que para Colau y Barcelona en Comú supondría continuar en la alcaldía gracias a los votos de Manuel Valls.
En rueda de prensa, la concejal socialista Laia Bonet recalcó que quién presenta candidatura, como ha hecho Colau, le corresponde encontrar los votos necesarios para ser investida.
El PSC no se sentará a negociar con Valls, solo con Barcelona en Comú. El líder del grupo municipal socialista, Jaume Collboni, avanzó el jueves que el apoyo a la investidura de Colau se supedita a la concreción de un pacto de gobierno antes del pleno.
Bonet formuló este viernes tres consideraciones: la primera, que “el independentismo es incapaz de gobernar”; la segunda, que los socialistas serán coherentes con lo que anunciaron durante la campaña y solo negociaran con BComú; y la tercera, que el PSC trabajará hasta el último momento para hacer posible un gobierno de progreso con los comuns.
Evitar la “parálisis”
Para evitar que la “parálisis” se instale en el Ayuntamiento, Bonet defendio “un gobierno de progreso entre PSC y BComú que evite el conflicto” que supondría una alcaldía encabezada por el independentista Ernest Maragall.
Sobre la posibilidad de que finalmente se forjara un tripartito (Bcomú, ERC y PSC) como reivindica Colau, Bonet lo rechazó. Insistió en que desde el primer minuto solo han apostado por un gobierno de progreso no independentista.
Los socialistas no ponen reparos a la continuidad de Colau como alcaldesa. Señaló que un acuerdo de gobierno entre BComú y PSC representa un “tándem de progreso en el que no es importante quién ocupe la alcaldía”.
El jueves, Maragall ofreció a Colau formar “tándem” con ella al frente del Ayuntamiento. Un día después, los socialistas también le proponen un “tándem”. Sin embargo, Maragall le reservaría el número dos; mientras que los socialistas la mantendrían, en principio, como número uno del consistorio.
Bonet argumentó que los resultados del 26-M avalan sus planteamientos: el 60% optaron por opciones no independentistas y otro 60% por opciones de progreso. “Esto es la confluencia es Bcomú y PSC”.
Colau someterá su candidatura a la alcaldía a la consideración del plenario de BComú. La votación se realizará esta noche. No se esperan sorpresas. Sin embargo, tan solo se votará la decisión de Colau de optar a la reelección. Queda para más adelante la consulta sobre si aceptan el socio elegido.
En 2017, los afiliados de BComú votaron a favor de romper el pacto de gobierno que por aquel entonces mantenían Colau y Collboni.